BILBAO. Un tramo del puente fue cerrado al paso de peatones y ciclistas el pasado 28 de junio, cuando la cubierta que cobija a los peatones sufrió la fractura de una de las placas de su techumbre; las obras de reparación se iniciaron a primeros del pasado mes de octubre.
La institución foral ha precisado hoy en un comunicado que, aunque las obras de reacondicionamiento del paso peatonal del puente no terminarán hasta finales de enero, las restricciones al paso de peatones y ciclistas se eliminarán desde este fin de semana.
Los trabajos de reparación han consistido en la restauración de los defectos estéticos en la cubierta y la rampa de acceso peatonal, así como la mejora de la cimentación del muro de la rampa, para independizarlo frente a consolidaciones futuras del terreno sobre el que se sustenta.
Los remates que quedan pendientes son la restitución de la imposta lateral, el cerramiento total de la marquesina y el pintado del pavimento.
Estas últimas tareas está previsto que se realicen a partir del día 8 de enero, de manera que el puente quede libre para el tránsito durante las fechas navideñas.
A partir del 8 de enero se reanudarán los trabajos, cortando alternativamente al tránsito solamente una mitad de la sección para que mantenga su operatividad peatonal.
Las obras de reparación fueron aprobadas con un presupuesto de 450.000 euros y un plazo de ejecución de entre 3,5 y 4 meses.