Bilbao - El comité de empresa de Bilbobus mantendrá el lunes una reunión con la empresa concesionaria del servicio en la que los representantes de los trabajadores confían se les “ofrezca algo”, después de que la totalidad de trabajadores secundaran ayer los paros ante el bloqueo en la negociación del convenio.

El comité tiene convocados nuevos paros para lunes y miércoles de la próxima semana, tanto en los turnos matinales, de 7.30 a 11.30 horas, como en los vespertinos, cuando pararán de 17.30 a 21.30 horas. Además, el viernes próximo, festividad de Santo Tomás, cuando Bilbao se colapsará con el tradicional mercado, las comidas y cenas de empresa, así como las compras de última hora tanto de alimentos como de regalos para Olentzero, los trabajadores de Bilbobus tienen previsto un paro de 24 horas, si antes no se soluciona el conflicto.

El secretario del comité de empresa de la concesionaria de los autobuses bilbainos, Julio Hernández, destacó que, una vez más el seguimiento de la huelga ayer fue “total, como todos los días” y criticó que “la empresa sigue sin realizar avances ni nuevos contenidos” a su propuesta inicial.

Sin embargo, Hernández reconoció que la empresa citó al comité a un nuevo encuentro que se desarrollará el lunes, cita en la que el representante de los trabajadores confía en que, “por fin”, la empresa concesionaria del servicio sea “capaz de ofrecer algo porque la gente está muy impaciente”. “Llevamos un año tratando de negociar y parece que nos toman por tontos. En la reunión anterior lo único que vinieron a ofrecer fue menos incluso de lo que teníamos”, valoró.

La plantilla de Bilbobus ha realizado cinco jornadas de paros parciales durante este mes, como denuncia por la imposibilidad de firmar un nuevo convenio, así como por los “recortes” y la “situación insostenible “que padecen los trabajadores de Bilbobus, según explicó en su día el representante de ELA, Gaizka San Miguel, que también criticó que la empresa alega “una teórica mala situación económica”, aunque en el trienio 2014-2016 sus beneficios rondaron los 3,5 millones de euros. - DEIA/Efe