Bilbao - La rehabilitación del viejo enclave de vecinos entre pabellones industriales y fábricas ha dejado una huella evidente. El frente acuático que se observa desde la orilla contraria, en el barrio de Olabeaga, es digna de guardarse en una fotografía. De hecho, algunos de los proyectos de rehabilitación han generado bloques tan coquetos que han sido ejemplo a seguir. Así, cuando los vecinos de Olabeaga observaron lo bello que había quedado el primer edificio actualizado, el número 43 de Ribera de Deusto, quisieron que sus casas también fueran rehabilitadas.
Surbisa no se arredró y aceptó el reto. En 2012, la entidad efectuó los necesarios estudios técnicos y socioeconómicos para declarar también a Olabeaga Área de Rehabilitación Protegida en la que se integraron 38 edificios antiguos residenciales. Otros 78 bloques de viviendas y diez industriales quedaron fuera al no contar con los requisitos necesarios. El sistema ha sido el mismo que en la margen opuesta. Se ha trabajado con vecinos para convencerles de la modernización de sus viviendas apoyándoles en las tramitaciones administrativas o petición de subvenciones y convirtiéndose en ventanilla única para la rehabilitación del barrio. En el primer cuatrienio se han acometido ya 22 actuaciones para mejorar las estructuras y la habitabilidad de los edificios, instalar ascensores e introducir medidas de eficiencia energética. - A. G. A.
