BILBAO. En un comunicado, los trabajadores del Colegio Ibaigane han mostrado "sorpresa y malestar" ante la "noticia inesperada" del cierre del centro educativo a partir del próximo curso, que "llena de angustia e incertidumbre nuestro futuro".
Según han indicado, 38 trabajadores y cerca de 300 alumnos se van a ver afectado por este "triste final" del colegio, al que han llevado "motivos económicos". A la espera de recibir "informaciones más concretas", han afirmado que siguen "luchando por la defensa de un modelo educativo como el que representa este centro de iniciativa social".
De este modo, han subrayado que la labor social desarrollada durante los últimos años "es un valor nada despreciable y a tener muy en cuenta", como evidencia "la respuesta de nuestras familias y alumnos".
En su opinión, el cierre de un centro de estas características supondrá "una pérdida relevante y significativa" dentro del sistema educativo "no tanto por las dimensiones del colegio, sino por las personas y los valores educativos que se pierden con él".
ATENCION A LA DIVERSIDAD
Los trabajadores han explicado que Ibaigane es un colegio de iniciativa social, "con ideario cristiano" y con una oferta educativa de 0 a 16 años, que, durante más de 35 años, se ha definido por "trato cercano, seguimiento individualizado, atención a la diversidad en sus múltiples vertientes, integración de personas con necesidades educativas especiales, personas de colectivos socialmente desfavorecidos, personas de diferentes orígenes y culturas".
También han destacado la "gran implicación" de toda la comunidad educativa, "hasta el punto de que los propios profesores (en el que se incluyen los distintos equipos directivos y la propia Dirección) han hecho renuncia de parte de sus derechos con el fin de dar continuidad al proyecto educativo de Ibaigane, convencidos de que la escuela debe ser un lugar de cambio, social, personal y de crecimiento humano".