Bilbao. "Nos han ninguneado absolutamente, estamos cabreadísimos". El presidente de la asociación Bilbao Centro, Félix Usunaga, era ayer el fiel retrato del enfado que ha provocado entre los comerciantes la decisión del Ayuntamiento de fijar un calendario para abrir los festivos. Usunaga se mostró especialmente molesto por el hecho de que PNV, PSE y PP hayan alcanzado ese acuerdo "sin contar para nada con nosotros", por lo que exigió que el Consistorio "dé marcha atrás" y revoque la decisión. "Que vayan los políticos a abrir las tiendas", espetó.
Félix Usunaga conoció la víspera del pleno la noticia de esta decisión. Ni siquiera la semana pasada, en una reunión que mantuvieron con representantes municipales, estos les trasladaron su intención de fijar un calendario para los comercios. "¿A quién han tenido en cuenta para tomar esta decisión? Porque a nosotros, que representamos a más de 500 comercios, no nos dijeron nada", criticó. "Han pasado de las asociaciones de comerciantes, han pasado de Bilbao Dendak. No han hecho un estudio serio sobre qué puede suponer eso para el comercio de Bilbao... Han hablado con intereses particulares y han pasado del interés general. Han hecho lo que les ha dado la gana, sin contar absolutamente con nadie", destacó, para ironizar con que "me acabo de enterar de que los políticos saben qué días les conviene abrir a los comercios".
Para el presidente de Bilbao Centro, esta decisión ha dejado sin valor la Mesa de Comercio, un instrumento para fomentar la actividad del sector en la villa y en el que están representados tanto el Ayuntamiento como los comerciantes. "¿Han reunido a alquien de ese órgano? Si no somos interlocutores para dar nuestro punto de visto, no lo somos para nada", advirtió. "Esto no va a quedar así, tendrá una respuesta. Si no cuentan con nosotros, igual tenemos que ir a otro sitio. ¿Nos van a abocar a ir a la manifestación de los sindicatos?", planteó.
En su opinión, la apertura en domingos "no es la solución para los problemas actuales del comercio", y afirmó que no existe "ningún estudio" que demuestre su impacto positivo en la villa. "En absoluto va a ser beneficioso para Bilbao. En la mayoría de los casos, no tenemos ni la gente ni los recursos para abrir, ni el consumidor lo demanda. Los turistas no vienen a comprar a Bilbao. Con la que está cayendo no tiene ningún sentido. Es una decisión tan arbitral que no hay por dónde cogerla", lamentó. Y es que, advirtió, el problema actual es que, como consencuencia de la crisis, "no hay dinero" y eso no se va a solucionar abriendo los domingos. Por ello, considera que una medida de este tipo "lo único que va a conseguir es que el dinero cambie de manos. ¿A quién va a beneficiar esta medida?", se preguntó.
Por todo ello, el presidente de Bilbao Centro exigió al Ayuntamiento que "rectifique" y dé "marcha atrás" en esta decisión.