Siete citas para el Surne Bilbao para dar un golpe en la mesa
El Surne Bilbao se ha ganado con su afición el derecho a soñar con la Copa, pero debe refrendarlo fuera de casa, empezando el domingo en Lugo
Al Surne Bilbao le ha llegado el momento de dar un golpe en la mesa, ese que le puede permitir dar un giro a su temporada en la Liga Endesa y aspirar, de verdad, a cotas más importantes de las que ahora solo se habla con la boca pequeña. No en vano, hace tres años que los hombres de negro no ocupaban puestos de Copa después de diez jornadas disputadas. El gran reto ahora es lograr sumar victorias fuera de casa para prolongar esa ilusión más allá de Miribilla y la primera oportunidad está este próximo domingo en Lugo, un choque al que el equipo de Jaume Ponsarnau llegará después de jugar en Eslovaquia ante el Prievidza y afrontar, por tanto, dos desplazamientos complicados.
Durante toda esta semana, penderá sobre el Surne Bilbao el hecho de que una derrota en el Pazo lucense supondría llegar a un año natural sin ganar fuera de casa. El último triunfo como visitante tuvo lugar también en una cancha gallega, el Coliseo de A Coruña, el 28 de diciembre de 2024. Este de los viajes es un factor a tener en cuenta a la hora de analizar estas dieciséis derrotas consecutivas lejos de Bilbao, como también la entidad de los rivales, algo a lo que se refirió el técnico tras el duelo ante el Lleida: “Las salidas que hemos tenido hasta ahora esta temporada han sido muy complicadas”.
No le falta razón ya que tomando como referencia solo este 2025, el Surne Bilbao ha jugado dos veces en Madrid, dos en Gasteiz, dos en Málaga, dos en Badalona y otras dos en Manresa, además de una en Valencia, otra en Barcelona, otra en Andorra y otra en Tenerife. Con la del domingo, también será la segunda visita de los vizcaínos a Lugo. Son todas ellas canchas en las que el porcentaje histórico de triunfos de los bilbainos es muy bajo: unas porque el nivel de los rivales es superior y otras porque en ellas se hacen fuertes los anfitriones en busca de cumplir sus objetivos. Ni más ni menos que lo que está haciendo el Surne Bilbao esta campaña con sus cinco triunfos en cinco apariciones ligueras en Miribilla.
Tener como objetivo ganar al Breogán en su cancha es legítimo, sobre todo porque alguna vez tiene que romperse esa racha negativa, pero hay que poner argumentos suficientes para ello. El Surne Bilbao va reforzando su armadura con el paso de las jornadas, pero a esa coraza le aparecen grietas cuando tiene que jugar fuera de casa. La primera de todas tiene que ver con la capacidad anotadora, que tienen que elevar necesariamente para vencer en Lugo. Los hombres de negro promedian 75 puntos a favor como visitantes, mientras que el Breogán anota como local 92 puntos por partido, con unas rachas de acierto que le hacen temible. Tres equipos han vencido en el Pazo: el Valencia metió 113 puntos; el Gran Canaria, 92; y el Tenerife, en la última jornada, se fue a 108. El factor común en estas tres derrotas en casa es que sus rivales han anotado un mínimo de catorce triples. Por su parte, los de Luis Casimiro han anotado esa misma cifra desde los 6,75 metros en tres de sus cinco choques en casa.
Un calendario sin tregua
El Surne Bilbao tiene recursos para afrontar cualquier tipo de partido, como ya se ha visto, pero le queda confirmarlo en los escenarios más complicados. Como lo serán Girona y Granada, los otros dos equipos a los que debe visitar antes de que acabe la primera vuelta y que también basan sus aspiraciones en su fortaleza como locales. Allí irán los bilbainos dos días después de haber jugado en Miribilla el 2 de enero y tres después de hacerlo en Lisboa, respectivamente.
La Copa exige sumar fuera de casa o hacer pleno en casa, pero resulta demasiado optimista pensar que esto puede ser posible cuando tienen que pasar por el Bilbao Arena el Barça, el Valencia, el UCAM Murcia y el Tenerife, esto es cuatro de los siete primeros clasificados en estos momentos, que tienen muy bien encarrilada su presencia en la cita de febrero en el imponente Roig Arena. A la espera de lo que ocurra con los partidos aplazados este pasado fin de semana que tendrán difícil ubicación en el calendario, el Surne Bilbao se ha ganado el derecho a soñar al calor de su afición y la obligación de intentarlo porque nada tiene que perder. La última vez que pisó la Copa aún no había pasado una pandemia y volver a ella supondría recoger los frutos de la nueva realidad económica y deportiva del club, igual de prudente, pero más desahogada.
FIBA EUROPE CUP
Patrick Beverley llega al PAOK
Refuerzos importantes. El PAOK Salónica tiene un propietario nuevo que ha decidido invertir seriamente en el equipo y, por ello, el actual subcampeón de la FIBA Europe Cup se presentará dentro de un mes en Miribilla con llamativos refuerzos en sus filas. El más llamativo de ellos, a la espera de superar los exámenes médicos, es Patrick Beverley, base de 37 años con un polémico historial dentro y fuera de las pistas y un carácter peculiar que no le impidió disputar cerca de 700 partidos en la NBA. La temporada pasada militó en el Hapoel Tel Aviv, pero salió del equipo por un enfrentamiento con el técnico Dimitris Itoudis. Junto a Beverley, el PAOK ha sumado a Breein Tyree, del Igokea, y Tim Allen, del Trapani. Ambos estaban teniendo un papel destacado en la BCL y convierten a los de Salónica en serios candidatos a la FIBA Europe Cup.