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El San Pablo Burgos, rival del Surne Bilbao Basket, un club con gloria y drama en su pasado reciente

Recién ascendido a la Liga Endesa, ha vivido experiencias deportivas extremas el último lustro: tres títulos internacionales y un descenso a LEB Oro

El San Pablo Burgos, rival del Surne Bilbao Basket, un club con gloria y drama en su pasado recienteACB Photo/C. Cortés

El Surne Bilbao Basket estrenará su condición de local en la presente temporada de la Liga Endesarecibiendo este domingo (18.00 horas) al recién ascendido San Pablo Burgos, un conjunto recién ascendido con notable potencial, tanto deportivo como económico, y con una historia de poco más de una década en el plano profesional con pronunciadísimos dientes de sierra en lo deportivo, desde la gloria de tres títulos internacionales a la bajada en 2022 a los infiernos de la LEB Oro, donde ha permanecido tres ejercicios antes de regresar a la máxima categoría del baloncesto estatal con una plantilla de muy buen nivel que en su estreno en su Coliseum, ante más de 8.500 espectadores, demostró el potencial que atesora derrotando por un contundente 97-79 al Bàsquet Girona.

A los mandos del técnico brasileño Bruno Savignani, que el pasado curso logró el ansiado ascenso de manera inapelable, con solo dos derrotas en 32 encuentros tras dos ejercicios anteriores en los que pese a contar con plantillas de relumbrón no se conquistó el objetivo marcado, el conjunto burgalés ha construido una plantilla solvente de cara a la lucha por la permanencia. Ha mantenido en nómina al base islandés Jon Axel Gudmunsson, al escolta argentino Gonzalo Corbalán, a los aleros Dani Díez y Pablo Almazán y al pívot estadounidense Luke Fischer y sus movimientos en el mercado estival han sido notables.

Fichajes interesantes

En posiciones exteriores ha incorporado al base brasileño Raul Neto, con amplia experiencia en la NBA y que la pasada campaña apenas jugó siete minutos en el Barça por culpa de las lesiones, el escolta estadounidense Jhivvan Jackson, que llega después de ser elegido MVP de la Bundesliga en las filas del Wurzburg, un jugador con buen pasado en la ACB como Leo Meindl, o Juan Rubio, mientras que el base Sergi García ha firmado recientemente un contrato temporal de dos meses.

Por dentro, el ala-pívot Jermaine Samuels aterriza procedente de la Liga de Desarrollo de la NBA, el potente angoleño Silvio de Sousa debe sumar físico en el puesto de pívot y el joven Yannick Nzosa, que hace un lustro tuvo una irrupción llamativa en la ACB con el Unicaja, cierra la rotación. El rendimiento del quinteto formado por Gudmunsson, Corbalán, Jackson, Meindl y Fischer fue fundamental el día del estreno.

Éxito

El San Pablo Burgos regresa a la Liga Endesa con el objetivo de asentarse en la categoría y de lograr estabilidad deportiva después de unos últimos cursos de enormes emociones, para lo bueno y para lo malo. Su equipo profesional fue fundado en 2015 (anteriormente competía en categoría provincial como Club Baloncesto Miraflores) después de que el otro club de la ciudad, el Tizona, no pudiera completar en los despachos el ascenso deportivo a la ACB. Solo necesitó dos años en LEB Oro para desembarcar en la Liga Endesa. Tras una temporada de debut en la que arrancó perdiendo sus siete primeros partidos, acabó salvándose con solvencia y en la campaña siguiente, la 2018-19, terminó decimoprimero, ganándose un billete para disputar la Basketball Champions League.

Sus dos siguientes ejercicios fueron sobresalientes, con dos clasificaciones para los play-off, una participación en la Copa y, sobre todo, dos títulos consecutivos en la BCL, además de una Intercontinental, con Joan Peñarroya en el banquillo y jugadores como Bruno Fitipaldo, Thad McFadden, Augusto Lima, Earl Clark, Pablo Aguilar, Vitor Benite, Jasiel Rivero, Ferran Bassas, Alex Renfroe, Omar Cook, Ken Norton o Xavi Rabaseda.

Caída

Pero el sueño pronto se tornó en pesadilla. Solo una campaña después de levantar dos títulos internacionales, el San Pablo Burgos cayó en barrena. Ni Zan Tabak ni Salva Maldonado ni Paco Olmos fueron capaces de enderezar el rumbo de una nave que acabó colista de la ACB en 2022, con solo diez victorias, y que se despidió de la categoría con aquella imagen que dio la vuelta al mundo en la que su presidente, el volcánico Félix Sancho, obligó a sus jugadores a arrodillarse ante su afición para pedir perdón.

Con inversiones en plantilla muy importantes, parecía que la amarga experiencia de regresar a la LEB Oro iba a durar solo un año, pero las cosas no salieron de la forma esperada, ni mucho menos, y tras dos amargas experiencias fue a la tercera cuando el efusivo público del Coliseum pudo, por fin, volver a saborear alegrías que ahora quiere prolongar en la ACB.