Jaume Ponsarnau reconoció que su equipo hizo “un mal trabajo” ayer en Lleida y “asumo mi responsabilidad como entrenador”. En su análisis, el técnico del Bilbao Basket explicó que “hemos empezado bien con la ideas claras y sensaciones correctas. El Lleida iba incomodando, dificultando que encontráramos inspiración, tampoco hemos tenido acierto, pero al menos estábamos en el partido en defensa”.
El hundimiento llegó después. “Todo se ha precipitado en el inicio del tercer cuarto. Unos cuantos malos ataques que no hemos convertido debajo nos han creado desequilibrios. El Lleida ha corrido y ha corrido y siempre encontraba a un jugador solo. Nos han ganado en el juego de transición en lo que sabíamos que eran muy buenos. Hemos estado lejos de estar a la altura de lo que esperábamos, estamos enfadados y hay que dar una respuesta a un partido tan, tan, tan malo como el que hemos hecho hoy”, dijo.
Ponsarnau lamentó que de nuevo su equipo no lograra “llegar al descanso con mejores sensaciones y cierta ventaja en el marcador. Pero lo peor ha sido después cuando hemos fallado en cosas de baloncesto, no de táctica. En ese tramo hemos parecido muy malos, pero no somos tan malos. Ahora hay que encontrar la manera de no demostrarlo”, añadió el entrenador ilerdense, que aludió a la baja de ultima hora Kristian Kullamae, “que se hizo daño en la última jugada del último entrenamiento anterior y para nosotros es un jugador muy importante. Hemos tenido que cambiar roles, pero no lo habíamos podido entrenar”.