Una vez más, el Bilbao Basket hizo lo que muchos de sus incondicionales no esperaban y cuando todo pintaba feo, arregló el desaguisado creado en Polonia, devolvió la ilusión a todos sus seguidores y avanzó a las semifinales de la FIBA Europe Cup. Entre los cuatro mejores están representadas las mejores ligas del continente, a excepción de la francesa: Liga ACB, Bundesliga, Turquía e Italia. Será la cuarta presencia del conjunto vizcaino en una semifinal europea tras las que disputó en la Eurocup en 2008, 2010 y 2013. Solo en esta última alcanzó el partido por el título y ese será su reto de nuevo ahora.
Para ello, deberá superar con el primer partido en Miribilla el 27 de marzo y el de vuelta el 3 de abril, en plena semana de final copera del Athletic, al Niners Chemnitz, radicado en esta ciudad de la antigua Alemania del Este, que está a unos dos horas en coche de Praga y es la tercera más poblada de esa parte del país tras Leipzig y Dresde, sin contar la capital Berlín. La presencia del conjunto sajón puede sorprender por su pasado ya que el club fue fundado apenas en 1999 y lleva solo tres campañas en la máxima categoría, pero ahora mismo es el líder de la Bundesliga con solo cuatro derrotas en veintitrés partidos. Esta es, además, su primera participación de Europa, pero su trayectoria está siendo muy destacable ya que solo ha perdido un partido y ha superado su cruce contra el Casademont Zaragoza por una diferencia global de 200 a 150.
Otra de las peculiaridades del Niners Chemnitz es que lo dirige un argentino, Rodrigo Pastore, desde 2015. El técnico bonaerense de 51 años inició su carrera en los banquillos en el Vacallo suizo, donde acabó como jugador, y ahora ha construido un equipo que está siendo una de las sensaciones de la temporada en Europa con un estilo abierto, agresivo y muy coral que está promediando 87,3 puntos en la Bundesliga y más de 93 puntos en la FIBA Europe Cup.
Plantilla sin estrellas
En la plantilla del conjunto germano, no hay ninguna estrella, ni siquiera jugadores con un gran bagaje internacional, pero cinco de ellos anotan más de diez puntos o cerca de ello en la competición europea. El más destacado es el escolta zurdo Wesley Van Beck, formado en la Universidad de Houston y que inició su carrera profesional en el Palma de la LEB Plata. Los canadienses Kaza Kajami-Keane y Ager Uguak, que juega con Sudán del Sur, el alemán Kevin Yebo y los estadounidenses Ousmane Krubally, Jeffrey Garrett y Deandre Lawnsdowne completan el grupo principal de jugadores del Chemnitz, que está ante la gran oportunidad de su joven historia.
El Bilbao Basket tendrá ahora la posibilidad de abrir la serie en casa, lo que puede ser una ventaja en un final de mes en el que habrá cuatro partidos seguidos en Miribilla. Ayer miércoles por primera vez los hombres de negro lograron controlar a un rival atípico y jugar a lo que le interesaba. La otra semifinal medirá al Bahçesehir turco, que sigue siendo el favorito al título, y al Varese, un clásico del baloncesto italiano que está yendo de menos a más en el torneo. Los primeros remontaron también con mucha autoridad al Oporto y los segundos ganaron los dos partidos al Nymburk.