Si este miércoles por la noche Miribilla celebra por todo lo alto el acceso a las semifinales de la FIBA Europe Cup, querrá decir que el Surne Bilbao Basket ha hecho historia en esta competición continental al imprimir su nombre en la mayor remontada jamás vista en una de sus eliminatorias a ida y vuelta. Tras un partido horrible en el apartado ofensivo, con un 31% en tiros de campo y un nefasto 1-19 en triples, el conjunto vizcaino cayó por un contundente 83-64 en la cancha del Legia Varsovia, por lo que desde las 20.00 horas de este miércoles su misión será neutralizar esa desventaja de 19 puntos para estar presente en la antesala de la gran final.

Misión casi imposible atendiendo a los antecedentes y al comportamiento del equipo polaco en la presente campaña, con solo una derrota por esa diferencia, aunque no deja de ser llamativo que el Bilbao Basket lleve en la presente temporada siete victorias por 19 o más puntos, todas ellas en el Bilbao Arena y dos en encuentros de la Liga Endesa. Vamos, que la tropa de Jaume Ponsarnau posee la capacidad necesaria para dar la campanada, aunque para ello deberá mejorar mucho sus prestaciones respecto a sus dos choques más recientes, ambos a domicilio, y exprimir todo su potencial, algo que sí está logrando como anfitrión.

En siete de las nueves ediciones de la FIBA Europe Cup se ha utilizado el formato de eliminatorias a ida y vuelta y el balance es abrumador a favor de los equipos que ganaron el primer partido por diez o más puntos: 21-4. La remontada más grande la firmó en los octavos de final del ejercicio 2017-18 el Le Portel francés frente al Dinamo Sassari italiano, pues tras arrancar con una derrota por 17 puntos a domicilio se impuso en su cancha por 19. En la misma ronda, el Mornar montenegrino remontó una desventaja de 13 puntos frente al Ostende. Un curso antes, en cuartos de final, el conjunto belga había superado una brecha de 12 puntos del Enisey ruso, mientras que la última desventaja de dobles dígitos neutralizada la firmó en los octavos del mismo curso el Usak Sportif turco, que tras perder en la ida contra el Oradea rumano por diez puntos remontó ante su público ganando por 26.

Curiosamente, en la temporada 2018-19 se rozó una remontada de 33 puntos. Después de que el Hapoel Holon ganará el primer partido por esa renta, el Alba Fehervar húngaro, entrenado por Jesús Ramírez, que había sido técnico ayudante del Bilbao Basket un año antes, neutralizó su desventaja en el segundo con el mismo resultado (96-63), aunque el 5-11 en la prórroga desniveló la balanza a favor del lado israelí.

DURO RIVAL PARA EL BILBAO BASKET

En la hoja de resultados del Legia Varsovia esta temporada únicamente se registra una derrota por 19 puntos. Aconteció en el último duelo de la fase de grupos de esta FIBA Europe Cup, cuando los polacos, con el primer puesto ya asegurado y por lo tanto sin ninguna exigencia competitiva, cayeron en la cancha del Oradea rumano por 93-74. Eso sí en la competición doméstica han sufrido derrotas por 18, 17, 16 y 15 puntos, esta última el pasado sábado (70-85) en su propia cancha ante el Trefl.

Tendrá que ser el Surne Bilbao Basket el que lleve al límite al conjunto polaco, para lo que sobre todo necesitará incrementar su efectividad ofensiva con una rotación que se ve debilitada por la exigencia de tener que inscribir en cada convocatoria a cinco cupos de formación. En esta competición, el equipo de Jaume Ponsarnau ha sabido aprovechar su superioridad en las dos fases de grupos para firmar marcadores de escándalo: +48 y +19 contra los Caledonia Gladiators, +37 y +32 frente al Balkan Botevgrad y +25 en el enfrentamiento con el Sibiu.

LA INFLUENCIA DEL BILBAO ARENA

Pero en un entorno mucho más exigente como es la Liga Endesa, el Bilbao Arena también ha sido testigo durante este ejercicio de un par de resultados que catapultarían a los hombres de negro a las semifinales de la FIBA Europe Cup, donde probablemente esperará el Chemnitz Niners alemán después de su arrollador 64-98 en la ida en la cancha del Casademont Zaragoza. El conjunto de Jaume Ponsarnau abrió el curso con un 95-73 (+22) contra el Morabanc Andorra y acabó la primera vuelta de la competición doméstica con un 74-54 (+20) frente al Baxi Manresa.

El Bilbao Basket necesitará los puntos de Adam Smith. FIBA Europe Cup

En su última comparecencia en Miribilla, hace un mes, el Surne Bilbao Basket fue capaz de derrotar a un equipo de nivel Euroliga como el Valencia Basket por 15 puntos (93-78), por lo que la capacidad para darle la vuelta a la eliminatoria está ahí. Lo que hace falta es que el colectivo sea capaz de ofrecer los máximos que le permitan convertir en factible lo que en apariencia parece una misión casi imposible.