Las previas de los partidos del Surne Bilbao Basket se han convertido esta temporada en una sucesión de partes de bajas, incógnitas y problemas físicos y la comparecencia de Jaume Ponsarnau este martes para hablar sobre el trascendental encuentro del miércoles ante el Río Breogán (Bilbao Arena, 19.00 horas) en la lucha por lograr un billete para regresar a las competiciones europeas no ha sido, en absoluto, una excepción.

“Tenemos varias incógnitas. Ya visteis en el partido de Sevilla que Denzel Andersson sufrió un traumatismo de muñeca y de espalda fruto de la caída y ayer (por el lunes) no entrenó. A ver si hoy puede hacerlo. Dependerá de sus sensaciones con la espalda porque se ha descartado que tenga algo grave en la articulación. Ignacio Rosa también arrastra problemas en la planta del pie y tampoco entrenó, mientras que Georgios Tsalmpouris tuvo problemas en la espalda en la sesión de ayer. A ver si hoy pueden trabajar. Tomeu Rigo progresa bien, pero aún no tiene el permiso para competir. Al menos Jeff Withey ya está a 100% y acabó el encuentro contra el Betis con buenas sensaciones”, ha desgranado.

En este sentido, ha lamentado la “poca fortuna que estamos teniendo porque las lesiones están actuando sobre momentos de jugadores”, en referencia al ala-pívot sueco, que había sido el mejor hombre de negro en el choque disputado en Sevilla. “Pero es lo que hay. Tener ahora trece victorias con todo lo que hemos pasado tiene mucho mérito y queremos más. Nos toca rearmarnos de nuevo y competir”, ha apuntado.

EQUIPO TOCADO

En este sentido, el técnico catalán no ha escondido que el equipo no atraviesa por su mejor momento. “Ayer sí que vi al equipo tocado. Tengo la sensación de que pocos jugadores encontraron acierto y juego en Sevilla. Pero siempre hemos dado una respuesta cuando nos hemos visto en estas circunstancias. Pese al panorama que vi el lunes con todos los problemas físicos, creo que vamos a dar la cara”, ha avanzado.

Además, ha reconocido que en momentos complicados como el presente una de su funciones es proporcionar impulso al grupo. “Como entrenador sales tocado de días como el del Fuenlabrada y enfadado por no haber ganado, pero no tocado, de días como el del Betis. Yo intento buscar formulas para dar la máxima motivación al equipo. Siempre hemos tenido una respuesta positiva cuando hemos sufrido un contratiempo, nunca he tenido un grupo con tanto entusiasmo en ese sentido. Cuando puedes creer en tu equipo es una gran satisfacción”, ha afirmado.

Tras no haber podido cortar la negativa racha de diez derrotas fuera de casa, ha negado que la derrota en la cancha del Betis y la sufrida un mes antes en Fuelabrada puedan ser comparables: “Fue muy distinto. A pesar de que en el rebote perdimos, no vi tanto problema de actitud, sino de aptitud. Jugamos contra dos de los mejores reboteadores de la liga como son Volodymyr Gerun y Tyson Pérez y, además, por lo que generan sus pequeños tuvimos que jugar con nuestros interiores muy altos, cambiando además muchas veces en los segundos finales de posesión. El partido se perdió por detalles y acierto. En momentos claves ellos tuvieron mucho y nosotros poco”.

Ahora, espera que en estos momentos difíciles competir al abrigo de Miribilla vuelva a ser de gran ayuda para el grupo. “Se nos nota mucho cuando jugamos con nuestro público y queremos aprovecharlo, que sea un factor. Porque estamos justos y vamos apurados de jugadores e incluso de confianza”, ha reconocido. Ahondando en esta apreciación, el técnico catalán ha argumentado que “cuando lo digo pienso en energía pero también en nuestra cabeza. Cambiar roles constantemente supone también cambiar tácticas. Cuando hemos acertado el plan de juego, especialmente el ofensivo, hemos sido mucho más competitivos. Pero adaptarte para acertar el plan también conlleva un importante desgaste… Pero seguimos teniendo ilusión por aumentar nuestras victorias y a partir de eso queremos encontrar energía física y de cabeza”.

UN PARTIDO QUE VALE DOBLE

En la lucha por regresar a Europa, el partido contra el Río Breogán “vale doble porque es un rival directo. Nos congratulamos de tener ese objetivo con todo lo que nos ha pasado. Es un partido clave ante un rival que ha hecho las cosas muy bien y que estadísticamente es mejor que nosotros en casi todos los factores y ha encontrado rachas competitivas muy buenas. Es un rival que no nos va muy bien”. En esta pugna continental, Ponsarnau cree que el UCAM Murcia es el equipo que mejor llega a este tramo final: “Es el que más calidad tiene y eso le permite llegar con fuerza. Creo que es el equipo más completo”.

En lo que no se ha mojado demasiado es en la posibilidad de tener a sus órdenes el próximo curso a Melwin Pantzar, base sueco del Valladolid con el que la entidad de Miribilla ya ha mantenido conversaciones para cerrar su fichaje. “Está haciendo un temporadón. El equipo que lo fiche seguro que hará un gran fichaje”, ha señalado.