Jaume Ponsarnau lleva toda la temporada planteando objetivos a corto plazo que han permitido construir un equipo sólido y competitivo que, a falta de dos jornadas para el final de la primera vuelta, tiene opciones de jugar la Copa. “A lo mejor he sido un poco aventurado, pero ya que nos lo merecíamos he querido jugar con esta ilusión y nos hemos querido poner esta presión. Estamos con el chip y vamos a intentarlo”, comentó ayer el técnico del Surne Bilbao Basket, que añadió que el torneo copero, pese a la dificultad del calendario, es “a la vez una ilusión y un estímulo hacia la meta de la permanencia”, que es “el gran objetivo”.

El entrenador catalán se refirió al mérito que tiene la posición que ocupa ahora mismo su equipo ya que “hemos sufrido adversidades durante la temporada que nos hacían pensar que podía ser difícil llegar a ocho victorias a estas alturas. Las hemos afrontado con muy buena mentalidad y hemos sido muy competitivos”. En este sentido, Ponsarnau apuntó que el reto es “seguir luchando y trabajando para seguir siendo competitivos. La Liga va a crecer y va a mejorar y eso no nos puede coger relajados”. El Bilbao Basket disfruta en este tramo de la temporada de jugadores a gran nivel como Hakanson, “pero no solo él”. “Pero también sabemos que hay varios jugadores que no están jugando al nivel al que pueden jugar. Eso hace más ilusionante el futuro. Están trabajando para alcanzarlo”. Y es clave para ello dejar de lado las lesiones. Nikola Radicevic viajará hoy viernes con el equipo a Girona por si a última hora es posible contar con él, lo mismo que ocurre con Agustín Ubal, que ha ocupado toda la semana en recuperar su tobillo dañado.

Experiencia enriquecedora

En la capital catalana espera un equipo que ha ganado tres de sus últimos cuatro partidos y que obligará al Bilbao Basket “a pensar solo en ellos. No hay otro secreto que respetar al máximo al rival”. Jaume Ponsarnau colaboró en el ascenso del Girona como una figura de asesor. “Viví una experiencia fantástica ya que para mí resultó enriquecedora”, comentó. Probablemente, el club catalán, en concreto Marc Gasol, pensaron en el técnico de Tárrega como su entrenador en la ACB, pero “llegó la oportunidad de entrenar al Bilbao Basket y es lo que elegí”. “Estoy contento porque la elección que hice, pero también porque ahora el Girona tiene al entrenador más importante de la historia de la ACB, un maestro de todos nosotros”, señaló en relación a Aíto García Reneses, que empieza a hacer rendir a su equipo apoyado en el oficio de Marc Gasol y la frescura de varios jugadores que se entrenan en la Liga Endesa.

“Ahora van a tope y con una energía enorme”, advirtió Ponsarnau, que amplió: “En su propuesta dentro de la competición de ritmo es probable que el partido tenga más descontrol que control, quieren llegar descontroladamente a partir de asegurar el rebote defensivo y su primer pase, que es mortífero. Hay que hacer un esfuerzo de velocidad, de correr hacia atrás”.