Mientras espera que se aclare su horizonte competitivo y se resuelva el galimatías de partidos aplazados como consecuencia de los brotes de covid sufridos por la gran mayoría de los conjuntos de la Liga Endesa, el Surne Bilbao Basket, que no pudo jugar sus duelos ante el Unicaja y el Coosur Betis y se encuentra a la expectativa de saber si podrá regresar a la cancha del Bilbao Arena el próximo sábado ante el Morabanc Andorra, arranca el año 2022 con la positiva noticia de saber que Jeff Withey no ocupa ya plaza de extracomunitario.

El pívot estadounidense ha completado todo el proceso de trámites y papeleos necesario y la próxima vez que vista de corto lo hará como jugador comunitario. La ACB ha dado ya el visto bueno a su nuevo estatus y de hecho en la ficha de 'hombre de negro' que consta en su página web figura ya con licencia comunitaria.

Withey, nacido hace 31 años en San Diego, California, ha podido acogerse a este proceso al estar casado y tener descendencia con una ciudadana europea. Su mujer cuenta con nacionalidad sueca y ambos son desde el pasado año padres de una niña. Durante las últimas semanas, el club vizcaino y el pívot han ido quemando las etapas y completando los trámites administrativos para pasar a obtener la condición de jugador comunitario y finalmente el proceso ha cristalizado de manera positiva.

POSIBILIDADES DE MERCADO

Se trata, sin duda, de un nuevo estatus que es positivo tanto para el jugador como para el Surne Bilbao Basket. En el caso de Withey, se convierte en una pieza mucho más apetecible para cualquier conjunto al pasar a ocupar plaza de comunitario; en lo que a la entidad de Miribilla se refiere, a partir de ahora cuenta con la posibilidad de añadir a su plantilla a un nuevo jugador extracomunitario si lo estima oportuno.

El conjunto vizcaino arrancó el curso con Andrew Goudelock y el propio Withey como pareja de extracomunitarios. Cuando el escolta se lesionó, fue sustituido por otro estadounidense, Khyri Thomas. Cuando la 'Mini-Mamba' se recuperó, el club contó con tres jugadores para dos puestos, pero el problema fue efímero. Al lesionarse Thomas en su segundo partido como 'hombre de negro', se volvió a reclutar a Goudelock para el encuentro ante el Gran Canaria, el último disputado hasta la fecha por los de Álex Mumbrú, pese a que la idea original era buscarle una salida.

Ahora se abren interesantes posibilidades para el Surne Bilbao Basket en el caso de tener que volver a acudir al mercado ya sea por nuevas lesiones o por necesidad de reforzarse. No parece factible que Thomas y Goudelock, ambos escoltas, acaben el curso como pareja extracomunitaria por una mera cuestión de roles y composición de plantilla, pero con el nuevo estatus de Withey podría ocurrir. En el caso de dejar de contar con alguno de ellos y necesitar otra pieza en otro puesto, tener abierto el mercado extracomunitario, sobre todo el estadounidense, es una bendición.

DE MENOS A MÁS

Además, Jeff Withey va dando pasos al frente en lo que se refiere a su rendimiento y asumiendo cada vez con más continuidad y contundencia el rol de intimidador y protector de aro que de él se esperaba al ser fichado el pasado verano y que en los primeros compases del curso no pudo dar, primero por las secuelas del coronavirus, que le llevó a perder mucho peso, y posteriormente por sus problemas físicos. En los últimos compromisos se vio ya a un Withey mucho más sólido y muy por encima de sus promedios de la temporada (5,5 puntos, 5,1 rebotes y 0,9 tapones en 16 minutos por partido) y, en teoría, debería ir a más.