Ha llegado el momento de la verdad para el Bilbao Basket El conjunto vizcaino arranca hoy miércoles ante el Herbalife Gran Canaria (Bilbao Arena, 18.30 horas) su esprint final de cinco encuentros en doce días en busca de la permanencia en la Liga Endesa y lo hace mermado por el brote de covid-19 que ha obligado a sus jugadores a aislarse durante diez días en sus respectivos domicilios, cortando el ritmo competitivo de un grupo al que las adversidades se le han amontonado desde el amanecer del curso. Pero ya no hay tiempo de mirar hacia atrás. El conjunto de Álex Mumbrú saltará a cancha 17 días después de su último compromiso sabiendo que, a día de hoy, está obligado a ganar tres de sus cinco duelos restantes para lograr la salvación, cuatro en el caso de que el Movistar Estudiantes acabe ganando el único compromiso que le queda por disputar. Así de cruda está la cosa.

Además, Álex Mumbrú confirmó ayer martes que "casi al 100%" no podrá contar hoy con alguno de los tres jugadores que no pudieron volver a los entrenamientos el sábado con el resto del equipo: Ondrej Balvin, Arnoldas Kulboka y Regimantas Miniotas. "Intentaremos tener a los que podamos, a ver si alguno es capaz de entrenar. Balvin es el que peor lo está pasando. Está con síntomas constantemente y de momento ni siquiera le hemos visto", lamentó, reconociendo que sabe de la dificultad del reto: "El equipo mentalmente es consciente de la importancia de la situación, pero necesitamos que nos acompañe el físico. ¿Complicado? Está complicado. ¿Imposible? No, porque nos quedan cinco partidos y dependemos de nosotros mismos. Todos somos conscientes de que jugamos muchos partidos en poco tiempo y después del covid habéis visto cómo han salido equipos como el Andorra, el Murcia o el Burgos. A estos equipos les costó bastante y sabemos que a nosotros también nos costará. Es lo que toca vivir. Hay que pensar en el primer partido y no mucho más allá".

Ante la incertidumbre de la situación de tres de los principales componentes de la rotación interior, el Bilbao Basket se ha reforzado con la cesión de Leonardo Totè, pívot italiano de 2,11 metros de altura y 23 años procedente de la Fortitudo Bolonia. "Acaba de llegar a Bilbao, estará mañana (por hoy) si los jugadores que han pasado el covid no pueden estar. Es un jugador joven que va a más, siempre ha destacado en las categorías inferiores de Italia. Para nosotros era importante su juventud por la energía que nos puede dar. Es un jugador que rebotea bien, con buena mano, zurdo, puede llegar a tirar de tres pero no es lo que buscamos de él. Queremos un jugador interior que controle el rebote y que nos ayude a tener una buena rotación", desgranó Mumbrú. Sobre el rival, espera un Gran Canaria "sin miramientos" al estar jugándose el play-off"Sabemos que es un buen equipo, con dos buenos bases, anotadores como A. J. Slaughter, buen juego de pick & roll, tiradores... Empezaron titubeantes, pero han ido poco a poco cogiendo la filosofía de Porfi Fisac, han hecho cambios que les han mejorado la plantilla y ahora mismo luchan por el play-off", destacó.