El Lointek Gernika regresó de mañana con una dura derrota ante un rival directo en la lucha por las ocho primeras plazas, que le ha ganado los dos partidos y toma con ello una ventaja importante. El Estudiantes fue superior y se aprovechó del nefasto día en ataque del conjunto granate, que se quedó por debajo del 33% de acierto en sus lanzamientos. Las gernikarras, que habían fallado muchos tiros bajo el aro, se sobrepusieron al 21-11 con que acabó el primer cuarto gracias a un parcial de 0-11 en los tres primeros minutos del segundo, con buena actividad defensiva y claridad en ataque a partir de ahí, para tener la única ventaja de todo el partido (21-22).
El Estudiantes respondió con dos triples consecutivos y recuperó el control de forma definitiva. El partido murió en el tercer cuarto en el que el Lointek Gernika colapsó, sin energía ni ideas claras, y solo pudo anotar un tiro libre y una canasta en el último minuto tras recibir un parcial de 17-0. Sin más amenaza exterior que la que aporta Ane Olaeta, poner el balón dentro de la zona resulta complicado y las de Lucas Fernández cometieron ayer en esa búsqueda muchas pérdidas muy baratas que facilitaron las cosas a su rival.
“Este partido nos tiene que servir. No vamos a pensar que somos el peor equipo de la liga por este partido, pero la exigencia que tiene jugar fuera de casa es esta. No ponemos excusas y hay que tratar de entender que hay cosas básicas en las que no puedes fallar fuera de casa y, sobre todo, hay que tener más consistencia y solidez”, resumió Lucas Fernández.
MOVISTAR ESTUDIANTES: Salvadores (15), Banaszak (3), Whittle (10), Camilion (2), Alonso de Armiño (12) -cinco inicial- Saravia (1), Latorre (2), Díaz (0), Toribio (0), Topuzovic (9), Bura (4).
LOINTEK GERNIKA BIZKAIA: Dodson (10), Olaeta (10), Etxarri (4), Westerik (4), Chery (2) -cinco inicial- Buenavida (10), Zubiaga (0), Alberdi (0), Fam (8), Pivec (3), Ariztimuño (4).
Parciales: 21-11, 37-33 (descanso), 56-36 y 74-55.
Árbitros: López, Cañigüeral y Del Val. Eliminaron a Westerik.