El Lointek Gernika cerró un año complicado de la mejor manera posible, con una victoria que le coloca en la Copa de Zaragoza del mes de marzo. Las matemáticas aún no permiten asegurarlo, pero resulta imposible que el Gran Canaria remonte a las granates una victoria y 109 puntos en el average general en la jornada unificada que cerrará la primera vuelta este sábado. De esta forma, Maloste podrá disfrutar ante el Valencia Basket, uno de los mejores equipos de Europa, de una fiesta para inaugurar 2025 que tuvo su anticipo ayer en las gradas del Gasca, donde la afición granate superó en número y ánimo a la local.

El equipo de Lucas Fernández ha llegado hasta un quinto puesto muy meritorio, por detrás de las cuatro potencias de la Liga Femenina, partiendo de dos derrotas iniciales como locales. Pero el grupo ha ido creciendo y ganando en cuajo competitivo, algo que quedó en evidencia en Donostia, donde sin protagonizar un partido brillante supo disputar el último cuarto ante el IDK Euskotren, un equipo con más veteranía y que se jugaba mucho porque anda rondando los puestos de descenso. Además, la baja de Maya Dodson por enfermedad dejó la rotación gernikarra en apenas ocho jugadoras y eso obligó a ser muy cuidadoso con algunos detalles defensivos.

Las donostiarras empezaron mandando, pero el Lointek Gernika logró pronto un parcial de 0-9 que sin llegar al minuto 5 le dio una ventaja en el marcador que ya no abandonaría en lo que quedaba de derbi. Los dos equipos se jugaban mucho y se vieron muchos minutos de defensa en zona en los dos lados para forzar que esa tensión encogiera las muñecas y nublara las ideas. Cinco triples anotaron entre los dos equipos y las visitantes hicieron 3 de 17, los tres a cargo de Ane Olaeta. Al menos, el conjunto granate pudo imponer un ritmo más alto y logró activar hasta el descanso la baza de Awa Fam, muy superior bajo los aros. La joven jugadora de Santa Pola logró quince puntos en la primera mitad para que su equipo llegara a alcanzar una importante renta de trece puntos (26-39).

En la segunda parte, todo se volvió mucho más espeso. El Lointek Gernika no encontraba espacios en ataque para mover el balón con fluidez y encontrar a su juego interior y algunas pérdidas en salidas claras al contragolpe y los fallos desde la larga distancia le impedían sumar de la manera que más le gusta. Sin embargo, tampoco el IDK encontraba recursos en ataque más allá del uno contra uno y las entradas imposibles de Rosó Buch. Las de Azu Muguruza, con varias jugadoras fuera de ritmo, remaban y remaban, pero no llegaban. Una canasta de la mataronina ex del Lointek Gernika puso el 50-52 a 7.38 del final.

CARACTER PARA SENTENCIAR

Era un momento complicado, pero las gernikarras demostraron personalidad y carácter. Dos tiros libres de Laura Westerik, ex también del IDK Euskotren, y un triple de Olaeta respondieron enseguida para el 50-57 que abrió para los últimos siete minutos un margen de seguridad de tres canastas que al ritmo anotador al que avanzaba el partido, ya muy trabado y cargado de interrupciones, fue un botín muy valioso. Sin brillo, pero con solidez en defensa, avanzaron los minutos hasta que dos canastas de Kendra Chery, desacertada hasta entonces, devolvió los diez puntos de ventaja antes de que Olaeta pusiera la sentencia con un triple que premia a un equipo muy joven que ha ido adquiriendo madurez con el paso de los partidos y estará en la Copa de nuevo.

IDK Euskotren 57

Lointek Gernika 66

IDK EUSKOTREN: Cornelius (2), Buch (15), González (2), Pendande (15), Massey (8) -cinco inicial- Washington (0), Prieto (8), Claessens (7), Becker (0), Halvarsson (0).

LOINTEK GERNIKA BIZKAIA: Olaeta (11), Etxarri (2), Fam (17), Westerik (10), Chery (10) -cinco inicial- Buenavida (8), Alberdi (2), Ariztimuño (6).

Parciales: 15-23, 30-39 (descanso), 46-51 y 57-66.

Árbitros: Olivares, Chueca y Remisa. Sin eliminadas.