bilbao - Sergio Scariolo está en esa época del año en la que cuenta ya los días para iniciar su labor. El técnico de Brescia espera que, ahora que se deciden los títulos de clubes, no haya sobresaltos y pueda hacer la lista que desea. El seleccionador absoluto de España buscará una nueva medalla en el Eurobasket de septiembre y, mientras tanto, sigue con atención el progreso de aquellos jugadores que deben asegurar el relevo generacional de una selección muy exitosa.
¿Le ha dejado satisfecho lo que ha visto en el Campeonato de España júnior?
-Ha habido algunos partidos interesantes y disputados y otros con más diferencia, pero lo que más me ha interesado es comprobar la progresión de los chicos que seguimos desde el gabinete técnico de la Federación Española y ver si podemos incluir otros nuevos en ese seguimiento para las selecciones del verano y para lo que vendrá después. Siempre se recogen datos interesantes en este tipo de campeonatos.
¿Y esa progresión va por el camino adecuado a lo que será el baloncesto del futuro?
-La necesidad y la exigencia es ir cada vez hacia la formación de jugadores más que a la búsqueda de resultados. Hemos logrado muchas medallas en los últimos años, hemos competido de forma fantástica, lo que está muy bien, pero el foco de lo que necesitamos como baloncesto español en los próximos años es ver crecer a estos jugadores y ayudarles a dar los últimos pasos hacia la consagración. Estamos ante la inminencia de un recambio generacional y necesitamos asegurar ese relevo.
El problema para todos estos chicos es que el listón está muy alto, en la comparación van a salir perdiendo.
-Sería poco generoso poner el foco del éxito en la comparación con generaciones que están agotando su grandísima leyenda. No sería justo. Pero sí tenemos que mantener un nivel de competitividad alto y para eso hay que trabajar, confiar y apostar para ampliar el número de jugadores válidos para el futuro.
Hablando de los mayores, estamos ya en la época decisiva de la temporada. Supongo que estará deseando que no hay contratiempos que alteren los planes para el Eurobasket.
-Sí, espero poder tener una disponibilidad total de los jugadores que queremos seleccionar y que, al final, solo sea una cuestión de elegir por una cuestión técnico-táctica, de química, de equilibrio de grupo, que es lo que siempre hacemos, y no que nadie se quede fuera del grupo por problemas físicos, como por desgracia ocurrió otros años.
¿Va a haber muchas novedades en la lista de este verano?
-No, no debe haberlas. Sería una tragedia que fuera así.
Han surgido o progresado jugadores como Quino Colom, Alberto Díaz, Joan Sastre, Pierre Oriola o Ilimane Diop, que ya estuvo el verano pasado.
-Sí, son jugadores quizás no para lo inmediato o no todos, pero sí que deben ser importantes en el futuro cercano y están entre los que seguimos habitualmente, por supuesto.
También se ha visto este curso una nueva versión de los hermanos Gasol, también un Ricky Rubio más decidido a buscar el aro. Esto abre más posibilidades tácticas para enriquecer la propuesta de la selección.
-Pau con la selección siempre ha tenido el recurso del tiro de tres puntos, más que en sus clubes. Es algo que ya sabíamos que era una de sus virtudes y la hemos explotado para, además, generar y crear espacios y libertad de movimiento para los demás. Y Marc, incluso desde niño, ha tenido capacidad para tirar de fuera y ser ambivalente en su juego ofensivo. Esta temporada lo he explotado más con los Grizzlies y es algo que, desde luego, tenemos en cuenta. Y lo de Ricky es una cuestión de salud, ya que ha conseguido completar la temporada sin problemas, de confianza y de aprovechar el momento de la lesión de Lavine para dar un paso al frente y asumir una mayor iniciativa en la anotación. Pero Ricky es un jugador bueno en todo y, por supuesto, todo es cuestión de buscar el equilibrio, que es lo que nos ha llevado a los éxitos. Hay jugadores que han asumido mayor protagonismo ofensivo, pero balón solo hay uno y hay que compartirlo con generosidad, que es lo que buscamos siempre.
Este Eurobasket va a ser el último de lo que hemos conocido hasta ahora.
-Ojalá no fuera así, pero es posible que así sea. Eso será una motivación más para tratar de que, si es la despedida de un núcleo importante de jugadores, lo sea como se merecen.
Me refería también a que tras este Eurobasket empezará un nuevo calendario de selecciones que no sé si va a mejorar lo actual.
-No lo puedo decir. Sí es verdad que es algo para lo que llevamos tiempo preparados. No nos va a sorprender ni a pillar fuera de juego.
El verano pasado la preparación fue complicada. Estará deseando una mayor normalidad en el trabajo, aunque este año los jugadores están teniendo un gran desgaste.
-Sí, pero van a tener un mes largo de descanso que debe ser suficiente. Esperamos que no pase nada y, sobre todo, que la situación contractual de los jugadores les mantenga más presentes en la concentración de lo que ocurrió el año pasado.
Hasta ahora, los clubes de la ACB se han llevados dos títulos europeos en una demostración del gran nivel de la Liga Endesa. El Unicaja le toca muy cerca y en el Tenerife está Txus Vidorreta, que ha agradecido el tiempo que ha compartido con usted los dos últimos veranos como parte del éxito.
-Me alegro por el Unicaja, obviamente, y también por el Iberostar Tenerife, que ha hecho una grandísima campaña. Y, por supuesto, por Txus, al que yo también debo agradecer la ayuda y el gran trabajo que hizo en los dos veranos anteriores para que pudiéramos ganar las dos medallas.