IZASKUN García (Muxika, 1992) se ha convertido en la referencia de las jugadoras de la casa dentro del Lointek Gernika. Por las venas de la base vizcaina corre la sangre granate gernikarra. Desde mini hasta la Liga Femenina. El próximo reto, disputar la Copa. El crecimiento de la muxikarra ha ido de la mano siempre de su club. Juntos han ido quemando etapas, pasando algún que otro momento malo, pero siempre en línea ascendente hasta convertir el sueño casi utópico de una jugadora de formación, en una realidad. El Lointek Gernika confirmó la semana pasada con su victoria ante el Cadí La Seu su clasificación para el torneo del K.O., sin embargo, la Liga Femenina no sabe de celebraciones y no se detiene. Mañana, en Maloste, a partir de las 18.30 horas, el conjunto dirigido por Mario López disputará el derbi ante el IDK Gipuzkoa. “Queremos recuperar sensaciones tras unas jornadas un poco raras, lejos de nuestro mejor nivel. El derbi es un buen partido para ello porque los dos equipos lo daremos todo y siempre viene mucha gente. Va a ser complicado, pero lo estamos preparando bien y al ser en casa, lo tenemos mejor”, destaca Izaskun.

Aunque mirando atrás, la temporada de las forales roza la perfección, solo dos derrotas y unas sensaciones nunca antes vividas en la localidad vizcaína. “Estamos muy contentas porque mejor no podía ir la temporada. Estamos terceras con 8-2 y todavía existe la posibilidad de que Perfumerías Avenida o Girona tengan un susto y entrar directamente en las semifinales al acabar entre las dos primeras”, destaca la base.

El arranque del Gernika ha vuelto a superar un año más todas las expectativas, además, esta temporada por fin la Copa no les ha esquivado a última hora y podrán disfrutar de ese sueño tan perseguido y tan anhelado. “Este año al ver el equipo y lo bien que nos llevábamos, siempre tuve la ilusión de que podíamos conseguirlo. Jugar la Copa, encima con el club de toda mi vida, va a ser la leche”, afirma la base, que hace años nunca hubiera imaginado verse en esta tesitura: “De niña las veía a ellas y me parecía todo un mundo inalcanzable y haber logrado llegar hasta aquí me parece una pasada. Toda mi vida me he dedicado a ello y con mucho trabajo lo he podido conseguir”.

Las cosas funcionan en la cancha. El equipo disfruta y la propia base vuelve a sonreír tras unos años complicados. “La verdad es que estos tres últimos años han sido horribles por culpa de las lesiones. Primero tuve un esguince de tobillo fuerte y el año pasado estuve con problemas en la rodilla, por ahora no he jugado una temporada entera. Este año estoy sana, me siento súper bien y toco madera para que siga teniendo estas sensaciones”, apostilla la vizcaina. Los dolores le han dicho adiós a Izaskun y sin ellos no solo ha vuelto por sus fueros, la directora de juego del conjunto gernikarra ha dado un paso adelante este curso: “Tengo confianza, me veo regular y estoy muy cómoda en la cancha gracias a la ayuda de mi entrenador y del equipo. Intento aprovechar al máximo los minutos que tengo y trato de disfrutar, que es lo que estoy haciendo muchísimo este año”.

referencia de la cantera Esta temporada, Izaskun es la única jugadora salida de la cantera gernikarra y se ha convertido en el espejo en el que pueden mirarse las muchas jugadores jóvenes que pujan fuerte en las categorías inferiores. “Es una gozada, pero me gustaría que estuviéramos más. Aunque por detrás vienen jugadoras jóvenes y tendré que ponerme las pilas porque no creo que vaya a ser la única. Todavía les falta, pero con trabajo van a poder estar con nosotras en la plantilla”, cuenta la muxikarra, que lanza un consejo a esas candidatas a jugadoras del primer equipo: “Si entrenan duro y es lo que quieren, nada es imposible. En el deporte hay que sacrificarse mucho y el que se esfuerza al final lo consigue.