bilbao - Sito Alonso fue presentado como la piedra angular del nuevo proyecto del Bilbao Basket. Así lo sugiere la presencia en el Bilbao Arena de todo el consejo de administración del club, ese que ha concedido al técnico madrileño “una oportunidad que para mí es única”, y de sus representantes Luismi Rodríguez y Agustín Cuesta. “Me gustan los retos y este que tenemos ahora mismo en Bilbao es uno muy complicado. En las reuniones que tuvimos una vez acabada la Liga, vi ilusión por recuperar la autoestima, el honor, el baloncesto en Bilbao de forma contundente. Desde el primer momento tuve claro que era un paso más”, afirmó Alonso, que asumió desde el principio que mantener el compromiso adquirido le podía “costar caro”, pero “merecía la pena esperar a este proyecto por la ilusión que tienen los directivos”.
Y eso que hubo un momento en que el Bilbao Basket estuvo excluido de la competición, lo que complicó las cosas. “Había dos formas de afrontarlo: desde la sencillez del ‘estamos fuera’ o desde la total confianza hacia las personas con las que has tratado”, explicó.
Apenas lleva tres días de contacto directo con el club, pero el nuevo técnico lanzó un mensaje claro: “No nos podemos permitir ser el Bilbao Basket de antes”. Las circunstancias han cambiado drásticamente y ahora hay una obligación de “adaptarnos a un presupuesto”. Ese volver a empezar llevó a Sito Alonso a considerar la necesidad de hacer “una limpieza mental” en la plantilla. “Por eso, creí conveniente que hubiera menos de la mitad de jugadores del año pasado, aunque no quiere decir que otros no podrían haber estado y no fueran buenos jugadores. Pero los cuatro que siguen (Mumbrú, Raúl, Hervelle y Bertans) son los que yo consideraba más adecuados por cuestiones técnicas y tácticas y por su sentimiento y arraigo en la ciudad y en el club”.
Sito Alonso aseguró que todos los jugadores que han llegado nuevos “tienen claro dónde vienen y en qué realidad lo hacen y, sobre todo, quieren jugar en el Bilbao Basket”. En este sentido, admitió que la pieza que falta para completar el equipo era Dani Díez, pero el jugador madridista prefirió recalar como cedido en el Gipuzkoa Basket. El club sigue buscando un jugador que complete la línea exterior, “que encaje en nuestro presupuesto y que no tiene porqué ser ni joven ni cedido”, aunque sin ninguna prisa porque “ahora me importan más los que están, incluso los vinculados, que los que no están”. El técnico, eso sí, consideró a Dairis Bertans como “un jugador fundamental”, pero precisó que “aún estamos conociéndonos todos y viendo qué posibilidades nos ofrece la plantilla y cómo podemos aprovechar las características de los jugadores”.
en construcción Después de tres semanas de entrenamiento con mucha carga física y a punto de empezar los partidos amistosos, Alonso reconoció que el equipo “está a un nivel bajo, al 4,5 o 5 sobre 10” en cuanto a su proceso de construcción en una pretemporada atípica. “Esperamos dotar al equipo de las reglas suficientes para poder llegar al 5 de octubre en las mejores condiciones para competir. Luego, ya iremos añadiendo más en función de lo que nos dicte la competición y el rendimiento de los jugadores”.
Sin fijar objetivos, “pero sin limitarlos porque para ello trabajamos”, Sito Alonso señaló que la intención del equipo es “hacer que nuestros aficionados disfruten para devolverlos todo el apoyo que nos han dado”. “Han dado muestras de identificación con el club en los momentos buenos y malos, así que pedirles algo sería faltarles al respeto. Pero estamos en una situación diferente y hay que hacer las cosas perfectas. La unión de todos nos hará ganar más partidos, esa es una imagen diferencial del club en las últimas temporadas”, avanzó antes de mostrar su deseo de que el Bilbao Basket “sea un equipo difícil de ganar cuando juegue en casa y cuando juegue fuera de casa. A partir de ahí, podremos pensar en otras cosas”.