bilbao. Fran Pilepic ya es oficialmente nuevo jugador del Gescrap Bizkaia que ha cogido carrerilla en el mercado de fichajes y en apenas dos días ha confirmado a dos de las piezas de su nuevo proyecto. El jugador nacido en Rijeka hace 23 años es una apuesta de futuro del club que ha tenido que abonar al Siroki bosnio, equipo de procedencia de Pilepic, una cantidad aproximada de 60.000 euros y ha firmado un contrato de dos temporadas y una más opcional.

El nuevo hombre de negro, al contrario que Adrien Moerman y Nikos Zisis, es un jugador sin contraste aún en el más alto nivel. Su carrera va en un progresivo ascenso desde que se inició en el Svjetlost de su país y siguió en equipos modestos. Ha sido este curso pasado cuando Fran Pilepic ha despuntado en la Liga Adriática con el Siroki para alcanzar promedios de 14,8 puntos, 2,2 rebotes, 2,3 asistencias y un 42 % de acierto en triples. Su fortaleza física, pese a sus escasos 1,92 metros, le permiten superar los contactos y tener otras maneras de anotar como demuestra su 62 % en tiros de dos y su 88 % en tiros libres.

El escolta croata tuvo un rol muy destacado en su anterior equipo, donde tenía muchos tiros, casi diez por partido, y muchos minutos, algo más de 30, a su disposición. En el Gescrap Bizkaia jugará por primera vez competición europea y tendrá que acomodarse a un protagonismo menor en los esquemas de Fotis Katsikaris por lo que, obviamente, su producción tiene que ser menor. Lo contrario sería una grata sorpresa y supondría un enorme salto de calidad para el conjunto bilbaino.

internacional El buen hacer de Pilepic esta pasada temporada ha merecido la llamada de su selección que prepara el Preeuropeo a las órdenes de Jasmin Repesa. El jugador de Rijeka fue internacional U-16 con Croacia, pero no ha vuelto a las convocatorias hasta la edad senior. De momento, sigue aún en el grupo de quince jugadores que manera el seleccionador y de ser elegido definitivamente, Fran Pilepic no estaría a disposición de Katsikaris hasta mediados de septiembre, lo que retrasaría su adaptación.