Tras varias semanas de incertidumbre, la plantilla de Bridgestone ha dado hoy luz verde al mal menor, un ajuste laboral que el comité ha conseguido suavizar con menos despidos, más indemnización de lo inicialmente planteado por la compañía y un programa de prejubilaciones atractivo para los mayores de 53 años. Solo ELA había mostrado una oposición pasiva –no firmará el expediente de regulación de empleo– a la última propuesta de la dirección y los trabajadores han votado mayoritariamente a favor de la salida de 232 trabajadores en Basauri –cien menos de los planteados– y 188 en Puente de San Miguel (Cantabria), frente a los 211 que proponía la dirección en el arranque del proceso. 

¿Aceptas la propuesta de la empresa para las condiciones del ERE? Sí o no es la pregunta a la que estaban llamados a responder los 831 trabajadores de la planta de Bizkaia y los 418 de la fábrica de cántabra en el referéndum organizado por los sindicatos en ambas fábricas. La jornada ha sido larga e intensa. La urna se abrió en Basauri a las 5:30 horas, con el primer turno, y la votación se prolongó hasta las 22:00, con la entrada del último relevo. 

El resultado global ha sido de 805 votos a favor de la oferta de la compañía, 322 en contra, 29 en blanco y 3 nulos. En Bizkaia el apoyo fue más amplio –569 a favor y 191 en contra–, en Cantabria el voto estuvo más dividido –236 sí y 131 no–,

Carga de trabajo

Los empleados de la histórica fábrica de Basauri, la antigua Firestone, un emblema de la localidad vizcaina desde 1933 , se han enfrentado de nuevo a una situación límite y, a tenor del resultado del sufragio, han encontrado otra vez el camino más transitable. Reforzado además por el compromiso de la compañía de derivar más carga de trabajo cuando no sea posible atenderlo desde otros centros de producción. Garantía de futuro para una planta que lleva años enfrentándose a la competencia low cost del este de Europa, dentro y fuera de la multinacional, que tiene una planta en Polonia.

El pasado 1 de abril Bridgestone anunció un ERE para 546 personas en sus plantas de Basauri (335, un 40% de la plantilla) y Puente San Miguel (211) que la empresa justificó por los “profundos cambios que están teniendo lugar en el mercado europeo del neumático y laültnecesidad de adaptar la estructura productiva de la compañía”. La falta de concreción del argumento y los despidos planteados encendieron las alarmas en el comité, que se mostró firme en la protesta hasta que, después de semanas de encontronazo con la compañía, logró ablandar las posiciones iniciales hasta en dos ocasiones. Tras la última propuesta, ELA, que solo tiene un puesto de los trece del órgano de representación de los trabajadores, anunció que no firmaría el acuerdo porque se opone a las reducciones d eplantilla. 

Bridgestone y los comités de empresa empezaron a negociar el ERE, cuyo periodo de consultas se prorrogó, mientras los trabajadores han ido secundando diversos ciclos de huelga, que, con un seguimiento total, paraban la producción de la planta de Basauri durante esos días de paro.

Finalmente, la empresa trasladó este pasado lunes una última propuesta que reducía los afectados por el ERE a 232 en la planta vizcaína, casi un tercio, y a 188 en las instalaciones cántabras respecto a los 335 y 211, respectivamente, previstos inicialmente.

Última oferta

La empresa anunció también que la producción anual en Basauri pasaría de 700.000 a 800.000 cubiertas, lo que supone 100.000 más al año. Además, también se ha comprometido a que, si se recupera el mercado, las primeras 150.000 cubiertas adicionales también se realizarían en esta planta vizcaina y no en Polonia.

En el caso de la planta cántabra de Puente San Miguel, hay un compromiso de ampliar el catálogo de productos que se está haciendo e intentar buscar cubiertas y productos que permitan dar mayor rentabilidad a la planta, pero, por ahora, no hay una subida de producción y la dirección es pesimista al respecto. 

En la oferta de la empresa, los mayores de 53 quedan excluidos del expediente y les han presentado un plan que permitiría acceder a la prejubilación a todos los trabajadores que están afectados por el ERE en su puesto o en su área y que tengan 55 años cumplidos a 30 de junio de 2025 y lo harían con el 80% del salario neto y una revalorización del 2% anual.

Indemnización por despido

Sobre las condiciones del despidos, serían 45 días por año sin límite de mensualidades para los despidos forzosos, y 45 días por año, sin límite de mensualidades, más 30.000 euros al que se quiera acoger voluntariamente al expediente.

Asimismo, la dirección ha garantizado que en dos años no va a presentar ningún ERE y, si lo hiciera en el plazo de cinco años, empezaría la negociación con las condiciones que se aprueben en el expediente actual, como indemnizaciones de 45 días por año trabajado, sin límite de mensualidades.