Es una realidad que constatan los números que a Mikel Oyarzabal (Eibar, 21-IV-1997), lanzado y con la flecha hacia arriba, se le dan bien los derbis. Goleador desde el punto de penalti para dar a la Real Sociedad la Copa que se le escapó entre los dedos al Athletic en la final sin público que albergó La Cartuja el 3 de abril de 2021, el capitán txuri-urdin tiene por costumbre y afición vacunar a los rojiblancos. Ocho tantos en diecinueve enfrentamientos colecciona el eibartarra ante un rival que ha convertido en su víctima predilecta desde que debutó como profesional hace ya una década. Fue en octubre de 2015, en una visita al Levante con goleada incluida (0-4), cuando Oyarzabal se estrenó con una camiseta con la que suma 119 goles y 62 asistencias en 408 partidos oficiales sin haber hecho más tantos a ningún otro equipo que al Athletic.

Solo el Celta, en dos encuentros más, ha recibido también ocho goles por parte del 10 de la Real, que presenta un balance de resultados favorable contra los leones al acumular nueve victorias, tres empates y siete derrotas. Al citado tanto en la final de Copa disputada cuatro años atrás en Sevilla se suman otros siete en LaLiga, cuatro en el Reale Arena y tres en San Mamés. Se da la circunstancia, además, de que en seis de los siete derbis en los que ha visto portería Oyarzabal ha ganado la Real. La única derrota con gol suyo se produjo el 13 de enero de 2024 en San Mamés, cita correspondiente a la vigésima jornada liguera en la que el Athletic se impuso 2-1 gracias a un doblete de Alex Berenguer.

En la otra media docena de envites en los que ha marcado el atacante eibartarra ha cantado bingo el conjunto donostiarra, que vio cómo su actual capitán estrenaba su casillero de goles frente a los bilbainos el 28 de abril de 2018 en Anoeta. 3-1 ganó entonces la Real al equipo dirigido por Kuko Ziganda, que sufrió por primera vez el notable impacto de Oyarzabal en los derbis. Los dos de la pasada temporada, eso sí, se zanjaron sin aportación goleadora del guipuzcoano, que no pudo perforar las redes de la portería rojiblanca en la derrota txuri-urdin en San Mamés (1-0), ni en el empate sin goles en el Reale Arena.

La última diana de Oyarzabal frente al Athletic, baldía, tuvo lugar en la mencionada visita a la capital vizcaina en 2024 después de marcar también en el choque de la primera vuelta en Donostia, donde la Real venció 3-1. Dos temporadas después, el eibartarra volverá a tener la portería de Unai Simón entre ceja y ceja avalado por un óptimo estado de forma.

EN RACHA

En uno de sus mejores momentos en los últimos años afronta no en vano Oyarzabal el derbi de esta tarde en el Reale Arena, donde ejercerá como referencia ofensiva del equipo de Sergio Francisco. Ubicado como punta de lanza con Guedes y Barrenetxea pegados a las bandas, el capitán de la Real puede presumir de estar haciendo goles con cierta facilidad. Un doblete, sin ir más lejos, firmó el eibartarra para dar la victoria a su equipo contra el Sevilla en el último partido liguero disputado en territorio donostiarra.

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Autor de sendos tantos ante Bulgaria y Georgia en los dos últimos compromisos internacionales de la selección española, así como de otro gol y tres asistencias frente a la propia Bulgaria y Turquía, respectivamente, en el parón anterior, Oyarzabal figura actualmente como máximo goleador de la Real en lo que va de curso con cuatro dianas, dos de ellas de penalti. Ningún compañero iguala, ni se acerca a día de hoy a esa cifra, pues nadie ha hecho más de un gol a excepción de Oyarzabal, de cuya capacidad anotadora depende la Real en la recta inicial de la temporada.

Cuestionado por dicho escenario, Sergio Francisco afirmó ayer en rueda de prensa que “no me preocupa nada que Mikel haga goles. Ojalá siga pasando y estoy convencido de que así será. Llega al partido con un punto de confianza y seguridad todavía mayor del que ya tiene de por sí y vamos a seguir apoyándonos en él. Seguro que los demás van a ayudarle a hacer goles y van a dar ese paso también para que marquen más jugadores. Estamos cerca de que pase y ojalá sea en el derbi”.