El buen hacer del Athletic sobre el terreno de juego, con asistencias de récord en San Mamés, se vio enturbiado en el ecuador de la temporada por la huelga de animación que llevó a cabo un sector de la Herri Harmaila.
En algunos partidos, La Catedral vivió una especie de cisma en la grada, con enfrentamientos abiertos entre los seguidores. Un escenario que parece haber pasado, pero sobre el que Jon Uriarte ha incidido en la rueda de prensa de este jueves.
“Hemos vivido lo mejor y lo peor. Hemos tenido una huelga de animación en una grada que está específicamente creada, con muchos dolores de cabeza y económicos, para animar. Hemos tenido faltas de respeto, con multas y con lo que supone para el prestigio de la institución, minutos de silencio que se han pitado, intimidaciones a gente que quería animar, un sector de San Mamés enfrentado al resto del campo, como una especie de guerra civil. Es inaceptable y no lo vamos a tolerar”, ha remarcado el máximo dirigente rojiblanco.
Pulso al Athletic
Uriarte ha ido más allá al denunciar que “se lanzó un pulso al club y desde el Athletic se ha defendido lo que la mayoría quiere”.
En este sentido, el presidente de la entidad bilbaina se queda con el buen sabor de boca del final de la temporada en el coliseo rojiblanco: “Lo bueno ha sido que ha habido partidos en lo que el ambiente ha sido mágico. El último tercio de la temporada ha sido un soplo de aire fresco, porque hemos vuelto a estar todos unidos por una animación con respeto. De cara a la próxima temporada esperamos que se siga animando con respeto”.