El penúltimo entrenamiento del año, con una especial carga emocional al celebrarse en San Mamés con las puertas abiertas al público, se ha desarrollado sin la presencia de Oihan Sancet y Beñat Prados. El mediapunta de Mendillorri, que sufrió durante la visita a Osasuna un esguince en el ligamento lateral interno de su tobillo derecho; y el centrocampista iruindarrra, que ya se ejercitó al margen del grupo en la vuelta al trabajo el domingo en Lezama, se han perdido un entrenamiento en el que se han empleado en solitario Dani Vivian, quien se ha apartado tras los rondos iniciales, y Ruiz de Galarreta, en pleno proceso de recuperación de una lesión muscular moderada en la musculatura isquiosural izquierda.
Media hora de carreras sin balón ha completado el mediocentro eibartarra, a quien muchos aficionados ni siquiera han podido ver en acción al ser multitud los que entraron al campo más allá de las 11.00 horas. Apenas diez minutos después ha tocado a su fin la sesión para Vivian, quien sí ha tocado balón tanto en los rondos de calentamiento como posteriormente sin que su participación contra la Unión Deportiva Logroñés en Copa el próximo 4 de enero asome en peligro. A la espera de conocer la evolución de Prados, sobre cuyo estado físico no existe parte médico oficial, más dudosa se presenta la presencia en Las Gaunas de Ruiz de Galarreta, a quien Valverde podría no forzar a fin de tenerlo en óptimas condiciones de cara a la semifinal de la Supercopa ante el Barcelona en Arabia Saudí el 8 de enero.