Los calificativos se agotan para definir todo lo que está consiguiendo Óscar de Marcos en el Athletic. Un futbolista que llegó al club procedente del Alavés en el verano de 2009, que ha visto pasar el banquillo de San Mamés a siete técnicos distintos –Joaquín Caparrós, Marcelo Bielsa, Ernesto Valverde, Kuko Ziganda, Eduardo Berizzo, Gaizka Garitano y Marcelino García Toral–, ha convivido con hasta cuatro presidentes –Fernando García Macua, Josu Urrutia, Aitor Elizegi y Jon Uriarte–, que ha compartido vestuario con un buen puñado de jugadores y que es ahora, en su décimo sexta temporada como león, el capitán del conjunto rojiblanco.

En los poco más de quince años que lleva defendiendo los intereses del Athletic, el de Biasteri ha alcanzado el podio del ranking histórico de futbolistas con más partidos. Pocos días atrás superó a Txetxu Rojo y ahora, con 544 encuentros a sus espaldas, es el tercero, solo por detrás de Iker Muniain (560), al que podría dar caza esta campaña, y José Ángel Iribar (614).

Unos registros inalcanzables para el común de los mortales y que guardan historias curiosas, como que De Marcos es el único jugador en la centenaria historia del club que ha estado presente en las cinco remontadas europeas del Athletic a domicilio. Él es el denominador común. Y lo es, además, con un enorme protagonismo, tal y como recuerda el estadista Adurizpedia.

De Manchester a Razgrad

La inolvidable visita a Old Trafford en marzo de 2012, con unas 8.000 gargantas alentando a los leones, dio forma a la primera remontada continental del Athletic. Titular indiscutible para Marcelo Bielsa ocupando la media punta, pero con mucha libertad para moverse por distintas zonas, Óscar de Marcos logró el segundo gol de su equipo, con el que volteó el tanto inicial del Manchester United.

Tres semanas después, el de Biasteri volvió a dejar su sello en Europa, en esta ocasión en Gelsenkirchen, donde anotó el tercer tanto de los rojiblancos un partido en el que el Athletic se adelantó en el marcador ante el Schalke 04, pero que vio cómo un doblete de Raúl González les ponía en desventaja momentánea para acabar ganando por 2-4.

Años más tarde, tantos como cinco, con Ziganda en el banquillo, De Marcos puso su granito de arena marcando el tanto del empate en la remontada del Athletic frente al Panathinaikos en el partido de ida de la última previa de la Europa League, en la que los griegos fueron mandando por 2-0, pero que terminaron cayendo por 3-2.

Este pasado jueves, su participación contra el Ludogorets volvió a ser decisiva. Salió al campo poco antes de la hora de juego y apenas un cuarto de hora después asistió a Iñaki Williams para que este pusiera la igualada en el luminoso en una cita en la que Nico Serrano se inventó un gran gol para sellar el triunfo rojiblanco.

La quinta remontada europea del Athletic lejos de Bilbao tuvo lugar ante el Augsburgo en la temporada 2015-16, si bien Óscar de Marcos no disputó ni un solo minuto y tuvo que seguir el choque desde el banquillo. Aunque los leones se adelantaron en el marcador gracias a un tanto de Markel Susaeta, los alemanes llegaron al descanso con ventaja (2-1) antes de que un doblete de Aritz Aduriz en el tramo final le diera los tres puntos al Athletic.