San Mamés es uno de los quince estadios del Estado preseleccionados para convertirse en una de las sedes del Mundial 2030 que aspiran a organizar de manera conjunta España, Portugal, Marruecos y Ucrania. Los responsables de la Federación Española de Fútbol quieren tener para junio la lista definitiva de once campos que integrarán la candidatura. Y desde hace unas semanas personal de la FEF ha comenzado a examinar de forma concienzudo cada una de las infraestructuras. 

En las últimas horas le ha tocado a ‘La Catedral’ pasar el último examen de los miembros de la Federación Española y de la Portuguesa. Una visita de carácter técnico, en la que se han reunido con representantes del Athletic, del Ayuntamiento de Bilbao y del Gobierno vasco, para recabar la información necesaria para que el coliseo rojiblanco supere la última criba. Un test destinado para recabar la documentación necesaria exigida por la FIFA. Por lo que se ha publicado, San Mamés, tendría muchas papeletas de ser una de las sedes, una iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Bilbao. Cuenta con más de 40.000 espectadores de aforo, una premisa clave, sus instalaciones son adecuadas para un evento de tal magnitud y la ciudad tiene experiencia y capacidad hotelera para albergarlo. 

Un fin que también persigue Anoeta, pero es poco probable que Euskadi aporte dos estadios, por lo que la capital vizcaina o Donostia se quedarían fuera. Además de los estadios del Athletic y de la Real Sociedad, los otros trece preseleccionados son Balaídos, El Molinón, La Romareda, Camp Nou, RCDE Stadium, Santiago Bernabéu, Metropolitano, Mestalla, Nueva Condomina, La Cartuja, La Rosaleda y Gran Canaria. Además de los once estadios que elige España, Do Dragao, en Oporto, y Da Luz y el José Alvalade, en Lisboa, serían las sedes que aportaría Portugal. Está por ver cuántas ciudades aporta Marruecos en un Mundial en el que podrían participar 48 selecciones. 

Después de quedarse a última hora sin ser una de las sedes de la Eurocopa 2020 por culpa de la pandemia (la UEFA retiró la candidatura porque el Gobierno vasco no garantizaba la asistencia de público por las restricciones vigentes por el covid y la mandó a Sevilla), San Mamés podría sumar su segunda Copa del Mundo. En 1982, edición que ganó Italia, la vieja ‘Catedral’ fue el escenario de la fase de un grupo formado por Inglaterra, Francia, Checoslovaquia y Kuwait. 

Hasta septiembre de 2024, en su 74º Congreso, la FIFA no elegirá el organizador del Mundial de 2030, una cita para la que también se ha postulado la CONMEBOL. Argentina, Paraguay, Chile y Uruguay, en el centenario de la primera Copa del Mundo, trabajan en una candidatura que puede trastocar los planes de la ‘Ibérica’. Aunque el torneo en 2026 lo organizan Estados Unidos, Canadá y México, por lo que sería repetir continente. Arabia Saudí junto a Egipto y Grecia también quiere organizar el evento deportivo más importante al margen de unos Juegos Olímpicos.

La incorporación marroquí 

El pasado mes de marzo, por sorpresa, Marruecos desveló que iba a sumarse a la candidatura de España, Portugal y Ucrania. Un anuncio, realizado por el rey Mohamed VI, que llegó después de las dudas que había generado la Federación ucraniana. Su presidente, Andrii Pavelko, ha sido suspendido por sospechas de corrupción, pero tanto Luis Rubiales como Fernando Gomes, su homologo al frente del fútbol luso, han confirmado que el país actualmente en guerra sigue formando parte del proyecto. Inicialmente, Madrid y Lisboa lanzaron el proyecto, luego sumaron a Ucrania por lo simbólico de su acompañamiento en medio de la invasión rusa. Y recientemente se unió Rabat, dejando abierta la posibilidad de que por primera vez un Mundial se celebre en dos continentes, en este caso Europa y África.