QUIQUE Setién (27-IX-1958, Santander) se hizo cargo del Villarreal al estilo de cuando asumió el banquillo del Barcelona, cuando expresó: “Ayer estaba en mi pueblo con las vacas y hoy entreno a los mejores del mundo”. Al aceptar la responsabilidad de dirigir el vestuario del conjunto amarillo, también bromeó: “Mi mujer no me deja coger el teléfono comiendo, pero lo hice y era el Villarreal”. Y es que estas dos últimas experiencias de Setién como entrenador generaron sorpresa en el mundo del fútbol, dado que únicamente había entrenado hasta entonces a dos equipos de Primera División, Las Palmas (2015-17) y Betis (2017-19), pero algo deben ver en el santanderino para apostar por él en clubes de gran exigencia.

Setién se convirtió en técnico del Submarino amarillo después de que el Aston Villa pagara la cláusula de rescisión de Unai Emery. Esto sucedió el 26 de octubre de 2022, cuando el Villarreal ocupaba la séptima posición en la liga, con 18 puntos después de 11 jornadas disputadas. Llegaba, por lo tanto, en un contexto de necesidad. Las dudas se cernieron pronto sobre Setién, que firmó un empate y tres derrotas consecutivas en sus cuatro primeros partidos. En el segundo de ellos, en su estreno en la competición doméstica, encajó la derrota en San Mamés (1-0; Iñaki Williams), frente a un Athletic que antes de enfrentarse al estreno liguero del técnico cántabro sumaba los mismos puntos que el Villarreal. En el encuentro se pudo ver un saludo afectuoso entre Setién y Valverde; cabe recordar que el primero sustituyó al segundo en el banquillo del Barcelona.

El mal comienzo de la nueva etapa de Setién generó impaciencia en la grada del estadio de La Cerámica, donde se comenzó a escuchar el “¡Quique, vete ya!”. “Esto ya me ha pasado en otros sitios, yo las cosas las tengo claras”, expresó el cántabro, que se defendió alegando que sumaba solo diez entrenamientos al frente del equipo. “Cinco han sido prepartido y los otros cinco, postpartido”, manifestó.

Seis victorias seguidas –aunque tres de ellas alcanzadas en las primeras rondas de la Copa ante equipos de categorías inferiores– aplacaron la tormenta y dieron oxígeno a Setién, que ganaba así margen para asentar su proyecto.

Ha llovido desde entonces. El Villarreal fue eliminado de la Copa en los octavos de final a manos del Real Madrid, mientras que en la Conference League cayó derrotado en la misma ronda, los octavos, frente al Anderlecht, lo que recuperó la decepción entre la afición, un traspié que aún permanece muy vivo en la memoria, porque fresca permanece también la conquista de la Europa League en 2021 y la huella de Emery.

Setién y Valverde se saludan con afecto en San Mamés. JUAN LAZKANO

Actualmente el equipo groguet ocupa la quinta posición en la liga. Desde que Setién cogiera las riendas del equipo para estrenarse en liga en la jornada 11, en la que el Athletic contaba con los mismos 18 puntos, el conjunto amarillo ha alcanzado los 54, mientras que el combinado de Valverde ha obtenido 7 menos, un total de 47.

Hasta la fecha Setién ha dirigido un total de 30 encuentros, en los que ha computado 14 victorias, 5 empates y 11 derrotas. Un balance con el que el técnico santanderino ha hecho progresar al equipo en la tabla clasificatoria, pero no ha terminado de convencer. A falta de cinco jornadas, el Villarreal tiene la Champions League a 7 puntos de distancia. Desbancar a la Real Sociedad se antoja complicado. No obstante, la máxima competición europea es el anhelo de la entidad amarilla para seguir creciendo. Todo ello hace que la continuidad de Setién en el banquillo no esté garantizada para la próxima temporada, pese a que firmó un contrato que se extiende hasta junio 2024.

Aunque las dudas giran en torno al entrenador, Setién es fiel a una propuesta de juego donde la posesión es la protagonista. Es amante del fútbol elaborado y no rehúye de la asunción de riesgos. Ello no ha impedido al técnico apostar por la juventud ante las ausencias por lesión de Gerard Moreno y José Luis Morales –máximo anotador del equipo con 15 goles entre todas las competiciones– y la cesión al Tottenham de Arnaut Danjuma.

No en vano, en los últimos partidos ha alineado a la delantera más joven de la historia del club: Yeremy Pino (20 años), Nico Jackson (21) y Samu Chuckwueze (23), y los resultados no han defraudado, con dos victorias (Espanyol y Celta) y un empate (Valencia) en los últimos tres duelos disputados. El siguiente examen será la visita del Athletic, a la que la plantilla amarilla llegará después del permiso concedido de tres días y medio de descanso.

En esta etapa más reciente ha emergido la figura de Jackson, que ha anotado cuatro goles en esas tres últimas citas. Otro jugador que ha cobrado protagonismo desde la llegada de Setién es Chuckwueze, que suma 13 dianas y se ha erigido en el segundo mayor realizador de la plantilla. Estos jóvenes están sacando de apuros a un Setién obligado a sumar para convencer de su continuidad.