Yeray Álvarez (Barakaldo, 24-I-1995) es uno de los nombres propios del derbi del sábado en clave rojiblanca. Por un lado, porque asoma como una de las alternativas que maneja Ernesto Valverde para cubrir la banda derecha de la defensa ante las bajas de Óscar de Marcos por sanción y de Iñigo Lekue por lesión. Por otra parte, debido a su más que polémica expulsión, la primera en su carrera como profesional, en el choque que albergó el Reale Arena el pasado 14 de enero en la primera vuelta del campeonato, cuando vio la cartulina roja directa por un leve contacto sobre el japonés Takefusa Kubo que se tradujo en un penalti materializado por Mikel Oyarzabal. En inferioridad numérica y con un desfavorable 3-1 en contra afrontó el Athletic la última media hora del último derbi entre ambos equipos.
Tres meses después, bilbainos y donostiarras volverán a verse las caras con Yeray luciendo galones sobre el verde. Está por ver, eso sí, en qué demarcación, pues el bravo central de Barakaldo podría variar su posición para actuar como lateral. Dispuesto a ello, dejando la decisión final en manos de Valverde, se mostró en rueda de prensa al subrayar que “hay que estar preparado para todo”. “El entrenador es el que va a decidir los once jugadores que tiene que poner en el campo. Él mejor que nadie sabe quién va a jugar en esa posición y en todas las demás. Lo que mejor le venga al equipo lo decidirá él y si me toca jugar de lateral, lo haré de la mejor manera posible”, advirtió el ‘5’ del Athletic, quien incidió en que “un jugador lo que quiere es jugar, ya sea de central o de lateral y si me toca jugar en esa posición lo intentaré hacer lo mejor posible”.
Cuestionado por sus viejos recuerdos en el lateral derecho, demarcación que llegó a ocupar en partidos aislados antes de debutar con el primer equipo rojiblanco, Yeray manifestó que “hace bastantes años que me tocó y he jugado pocos partidos ahí, pero viendo a mis compañeros De Marcos, Lekue y Capa, con lo que pueda aprender y con los consejos que me puedan dar, siendo una suposición, los cogeré, los intentaré trabajar y lo intentaré hacer de la mejor manera posible si me toca”. No profundizó más respecto a una incógnita todavía por resolver el de Barakaldo, quien dejó claro sobre su citada expulsión en el Reale Arena que “aquello está olvidado. Fue la primera expulsión de mi carrera y ya dije que me pareció injusto, pero no hay que darle más vueltas. El partido del sábado es completamente diferente, es en casa con nuestra gente y hay que salir súper motivados. Vamos a tener el apoyo de todos y eso suma prácticamente un jugador más”.
Los tres puntos sumados en la visita al Espanyol han alimentado la moral de la tropa bilbaina, toda vez que “sabíamos que iba a ser un partido complicado después del golpe en la Copa y al no estar la moral del equipo al cien por cien, pero necesitábamos los tres puntos para seguir cerca de Europa, supimos darle la vuelta y se hizo un partido muy bueno”. “Después del mazazo en la Copa tuvimos una charla aquí con el míster en la que todos teníamos claro que para darle la vuelta teníamos que estar unidos y preparar bien el siguiente partido. Todos lo entendimos a la perfección y se vio desde el primer entrenamiento posterior a la eliminación que el equipo estaba junto”, valoró asimismo Yeray, quien resaltó respecto al inminente derbi ante la Real que “cualquier partido de LaLiga es complicado, porque cada equipo tiene sus armas, su juego y su estilo. La Real viene haciendo una temporada muy buena y sabemos la dificultad que tiene jugar contra este tipo de equipos, pero venimos trabajándolo durante la semana y en un derbi en San Mamés hay que salir a por todas. Queremos seguir con esta racha de coger puntos en el campeonato”.
En cuanto a la clasificación y las renovadas opciones de pelear por la sexta plaza que ocupa el Betis, a cinco puntos de distancia, el central rojiblanco defendió que “hay que ir partido a partido. Quedan bastantes puntos en juego y nuestro objetivo sigue siendo quedar lo más arriba posible en la tabla. No vamos a ponernos el objetivo de quedar quintos, sextos o séptimos, porque nuestra mentalidad tiene que ser ir en cada partido a por los tres puntos para acabar lo más arriba posible”. “Los rivales ahora se juegan muchísimo, cada uno tiene su pelea y todos los partidos de aquí a final de temporada van a ser complicadísimos”, añadió el vizcaino, quien calificó como “un sueño” haber alcanzado ya los 202 partidos como león, dado que “ni cuando empecé, ni hace tres semanas me lo esperaba. Es un trabajo de mucho tiempo y con mis compañeros todo se hace más fácil. Todos los entrenadores que he tenido me han dado su confianza y yo intento hacerlo lo mejor posible cada fin de semana”.
No se mojó Yeray al hincar el diente a la situación de Iñigo Martínez, aliado en el eje de la zaga, al limitarse a señalar que “le veo igual que siempre. Sigue entrenando con nosotros y con la misma actitud. Pertenece al Athletic hasta final de temporada, es mi compañero y si se queda estaremos encantados de tenerle aquí porque es un gran jugador, mientras que si se va darle las gracias por todo lo que ha hecho por este club”.
HORARIOS INACEPTABLES
Yeray, por último, abordó la problemática de los horarios, dado que los leones recibirán en jueves, a partir de las 22.00 horas, a Sevilla y Betis en las jornadas 31 y 33, respectivamente. “Es una putada para todo el mundo. Que la gente quiera ir a ver y animar a su equipo y nos toquen ese tipo de horarios nos fastidia a nosotros y más todavía a la gente que no pueda ir. El fútbol es de los aficionados y esos horarios no nos vienen bien a nadie. No son aceptables”, lanzó el central.
