Al mal tiempo, buena cara. A tan manido refrán se abrazaron los 37.564 fieles que se dieron cita en San Mamés para alentar a los pupilos de Ernesto Valverde en la búsqueda de los cuartos de final de la Copa. Con el frío como rival añadido a un Espanyol que tiró de un once inicial sumamente reconocible para intentar apear de la competición a los leones, los aficionados rojiblancos trataron de entrar en calor al abrigo del juego del equipo, que se reencontró con 'La Catedral' en la misma ronda que la pasada temporada. Entonces fue el Barcelona de Xavi Hernández, el jueves 20 de enero de 2022 a las 21.30 horas, el imponente adversario de un lanzado Athletic que se hizo con la victoria por 3-2 en la prórroga gracias a un gol de Iker Muniain en el minuto 105.

Lo vivieron in situ las 37.287 almas que se dieron cita en el coliseo bilbaino, 277 menos de las que se congregaron este miércoles haciendo frente a las adversas condicioes climatológicas con otro equipo catalán como rival. El temporal no fue motivo para que San Mamés proyectara una imagen desangelada. La Copa “pone” en Bilbao como remarcó el propio Valverde en la previa del choque de la noche del miércoles y no solo se notó en la alineación que diseñó el de Viandar de la Vera y en la seriedad con la que sus jugadores se tomaron el envite.

Además de a ras de césped, la importancia del encuentro fue palpable también en las alturas, pues la afición, más allá de la elevada asistencia, estuvo conectada en todo momento al partido a sabiendas de que el pasaporte para unos nuevos cuartos de final estaba en juego.

La llama del gol

Fue en el minuto 27, con el gol de un incombustible Óscar de Marcos, cuando San Mamés ganó aún más en temperatura para entrar realmente en calor, en ebullición. Asistió de tacón un inspirado Oihan Sancet y definió con templanza el ‘18’ del Athletic para superar al guardameta Joan García y firmar así el a la postre único gol del partido, suficiente para doblgar al Espanyol y permitir, en perfecta comunión y sintonía, la posterior celebración post partido entre afición y equipo. El deseo, de cara al inminente cruce de cuartos, pasa por repetir en ‘La Catedral’ la próxima semana, pues San Mamés siempre responde y más en la Copa.