Marcelino García Toral ha sido fiel a su palabra en el derbi ante el Eibar. Tal como advirtió el viernes en rueda de prensa, el técnico rojiblanco ha tirado del once de gala para encarar una cita que no quiso mandar a un segundo plano pese a asomar en el horizonte la final de Copa del próximo 3 de abril que enfrentará al Athletic y la Real.

El desarrollo del encuentro, sin embargo, ha dejado"triste" al de Villaviciosa, quien ha visto cómo un regalo de Unai López daba el gol del empate al conjunto armero sin que el rendimiento de sus futbolistas le convenciera lo más mínimo. "La sensación que me deja es de tristeza, porque no me ha gustado lo que he visto en el campo y, por tanto, estoy triste", ha confesado el asturiano, que hincó el diente al grosero error en el gol del Eibar.

Cuestionado al respecto, Marcelino ha afirmado que en partidos de máxima trascendencia como la inminente final copera "creo que no va a suceder esto seguro, me jugaría cualquier cosa, pero tenemos que preguntarnos por qué nos sucede hoy. Si encontramos la respuesta, tendremos la solución para ser competitivos de forma continuada y no jugar a rachas en los partidos", subraya el técnico, quien insiste en que "eso es lo que debemos preguntarnos, por qué hacemos lo que no toca hacer en determinados momentos, si bien ya digo que me juego cualquier cosa a que esto no va a suceder en el próximo partido".

En cuanto a la adversa dinámica de resultados en la Liga y un posible impacto negativo en la Copa, Marcelino destaca que "son dos competiciones diferentes". "Una es una ilusión y la otra parece ser una obligación, que también tiene una influencia en la respuesta que cada uno de nosotros tenemos que ofrecer", valora el asturiano, convencido, no obstante, de que "en ninguno de los casos estos resultados nos van a debilitar mentalmente tras jugar un muy buen partido contra el Atlético con un resultado negativo y tener después dos empates. Seguimos siendo un equipo sólido al que el rival llega muy poco, aunque si seguimos cometiendo errores como en este partido y se la regalas al rival, este la aprovecha con una muy buena ejecución".

Marcelino, así las cosas, remarca que de cara a la final ante la Real "no tengo ninguna duda de que futbolística y mentalmente vamos a llegar muy bien, pero hay que ser competitivo siempre, cada día, cada minuto, cada segundo y es lo que nos falta, por lo que tenemos que corregirlo".

"Me gustaría que fuera de otra forma, pero creo que tenemos parte de la mente con una sola idea y es la realidad", lamenta asimismo el entrenador rojiblanco, que no ocultó que el cambio del doble pivote ayer tras el descanso se debió a que "no me gustó la participación, la toma de decisiones, ni el posicionamiento" y que contra la Real "tenemos que saber el partido que tenemos que jugar, cómo desarrollarlo y tener acierto".