Marcelino García Toral se ha metido en una especie de burbuja estas últimas horas. Quizá no se esperaba el revuelo que ha generado la prueba de flotación de la gabarra, con la carga de euforia que conlleva el hecho de jugar dos finales de Copa en un intervalo de dos semanas. El técnico lo entiende, pero él se pone su propia coraza. "No estaba al tanto de lo de la gabarra. Supongo que lleva su proceso, es ajeno a nosotros. Está muy bien, pero no hemos ganado todavía nada. Queda un mes y jugaremos ante dos rivales complicadísimos. No le doy ninguna trascendencia. A mí no me va a distraer ni ocupar, porque lo que me preocupa es el partido ante el Atlético de Madrid" de mañana a las 19.00 horas, suspendido el pasado 9 de enero, precisamente en víspera de la celebración de la Supercopa, debido el temporal Filomena que azotó a la capital española.

El técnico rojiblanco se queda en una visión a corto plazo. "Estamos en el proceso de análisis y entrenamientos, nada nos mueve de lo inmediato, de intentar ganar, de ser competitivos en un partido superatractivo ante el líder, en el que queremos demostrar que somos un equipo fiable y difícil de batir para cualquier adversario. Todo lo demás es lejano, corresponde prepararlo cuando toque", ha subrayado el asturiano, que insiste en que "ganar una de esas dos finales es complicado, ganar las dos doblemente complicado. Mi atención está en el Atlético, en el Celta y luego en el Eibar, para coger unos días de vacaciones, desconectar y después enfocar la Copa".

El de Villaviciosa no ha dado pistas sobre la fórmula que aplicará en el Wanda Metropolitano y no ha querido pronunciarse sobre si mañana repetirá rotaciones como ya hiciera el domingo frente al Granada. "Para mí no hay un plan A, ni un plan B. Todos los jugadores son importantes", ha afirmado, para avanzar que Yuri Berchiche sufrió ante el Levante un "fuerte golpe en el pie" que le impidió alistarse ante el Granada, pero que, si no ocurre nada en el entrenamiento de esta tarde, estará listo para viajar a Madrid.

Sobre el Atlético, líder de Primera División, le ha definido como un equipo "con muchos recursos en ataque, con un Luis Suárez al que no le puedes dar ni el más mínimo espacio, porque es letal. Tiene mucha gente muy buena en segunda línea, con gol, con gran estrategia ofensiva, es un equipo supercompleto, es el que menos encaja y en doce ocasiones ha dejado su portería a cero", momento en que ha pedido un Athletic que ponga "las cosas difíciles al Atlético, porque así lo venimos haciendo. Fuimos capaces de ganar al Real Madrid y al Barça, pero este nos ha ganado también dos veces. Vamos con la idea de competir al máximo nivel y con la ilusión de tener acierto en las dos áreas, que son las decisivas", ha reflexionado Marcelino, que se ha mostrado satisfecho con el rendimiento de Alex Berenguer, tocado por una varita mágica en los últimos encuentros: "Ha tenido la virtud de convencerse de que en el ala derecho puede ser un gran jugador, está en un momento dulce y se lo ha ganado a pulso".