Aitor Elizegi compareció en la tarde del lunes para hacer balance de los resultados de la Asamblea General Extraordinaria de Socios Compromisarios en la que la Junta Directiva del Athletic vio aprobadas las cuentas del pasado ejercicio económico y los presupuestos del actual curso, pero en el que le reprobaron su gestión en la campaña 2019-20. A respuestas de los periodistas, el presidente de la entidad bilbaina agradeció, como ya hiciera al término de la reunión telemática, el "voto de confianza" recibido por parte de los compromisarios. "Lo conseguimos merecidamente, pero por otra parte nos han dicho que hay cosas que mejorar de la temporada pasada", agregó antes de afirmar que "hemos tomado nota de ellos y en la siguiente esperamos sacar los tres puntos, porque los volveremos a llevar a la siguiente Asamblea".

La Junta que lidera Elizegi aprobó las cuentas del pasado ejercicio con 422 votos a favor y 303 en contra y los presupuestos con 395 síes y 327 noes; mientras que recibió el rechazo de 433 socios compromisarios y la aprobación de 285 en el apartado de la gestión.

El máximo dirigente del club no quiso perder mucho tiempo en hablar de lo que habría pasado de no haber separado en el orden del día los puntos relativos a la gestión y las cuentas, pero sí manifestó su claro deseo de que en el futuro ambas cuestiones se voten por separado. Eso sí, admitió que la reprobación a la gestión les obliga a "muchísimo". "Cuando uno va con la firme intención a examinarse y se prepara, cree que ha hecho el esfuerzo y cuando te dicen que no has hecho lo suficiente, te tienes que replantear si lo habías preparado de manera firma y suficiente".

Lo que sí quiso dejar claro el cocinero de Santutxu es que la decisión de separar las cuentas y la gestión se debe a que han "evolucionado". "Miramos al futuro, el club tiene preguntas e incógnitas. Vamos resolviendo algunas cuestiones sobre la marcha, aprendemos que se puede votar con seguridad, participar de manera telemática, participar de las asambleas desde nuestra casa, y así va a ser en el futuro. Separar los puntos del orden del día para que el debate pueda ser más profundo. Una lección que me la guardo como histórica, no la quiero guardar como un punto y final".

De cara al futuro, Elizegi afirmó que han tomado buena nota de las apreciaciones de los socios compromisarios durante el cónclave del domingo: "Tomamos nota de las críticas constructivas, de las aportaciones que creemos que han merecido la pena, sin renunciar a la escucha. Todos estamos aprendiendo, a todos nos van a ayudar estas escenas y lo que estamos aprendiendo en la gestión de dos temporadas muy complejas".

En lo que respecta al año largo de trabajo que le queda a su Junta Directiva al frente del Athletic -recordar que tienen la idea de celebrar las elecciones a la presidencia en junio o julio de 2022, aunque no hay una fecha fija establecida-, el presidente de la entidad rojiblanca hizo hincapié en tres puntos distintos: el apartado deportivo, la grada de animación y la reforma de estatutos. "No podemos renunciar a nuestro discurso y a nuestro proyecto. Soñamos con ver a un Athletic campeón. Un reordenamiento de la grada que haga homenaje a los recuerdos que tenemos del viejo San Mamés. Y el tercer proyecto que está sobre la mesa. Todos tenemos una visión del club de cara al futuro, al siglo XXI, en cuanto a lo que significa participación, gobernanza, transparencia. Valorar y afrontar, para siempre, las asambleas en San Mamés y que fueran para siempre telemáticas. Cómo afrontamos el orden del día, nosotros defenderemos con la separación de cuentas y gestión. Ese debate tenemos tiempo para que sea en calma, podamos trabajar escuchando", expuso.

Aseguro, asimismo, que "muchos rivales salieron el lunes perdiendo porque el Athletic sigue adelante en su forma de entender, es leal y está unido".

Matización sobre la final

Por último, Elizegi quiso aclarar lo que dijo el domingo durante su discurso presidencial en relación a la posibilidad de que haya público en las gradas del estadio de La Cartuja en la final del próximo 3 de abril contra la Real Sociedad. Si bien dejó caer que sería imposible, el lunes apuntó que sus palabras atendían a sus "sensaciones". "Me precipité igual. Obviamente, un presidente no debería exponer sensaciones subjetivas", lanzó a modo de disculpa.