Rafa Alkorta habló ayer, con ese tono y estilo tan suyos, largo y tendido sobre el caso Llorente, ese que mantuvo en vilo al entorno rojiblanco en la tarde-noche del lunes. El sainete en el que se convirtió el último día del mercado de fichajes se trasladó a la sala de prensa de San Mamés, donde el propio director deportivo del Athletic admitió, sin darle la más mínima importancia al asunto, que el intento de fichar al delantero nació del vestuario. De algunos jugadores que, sabedores del interés por regresar a Bilbao del que fuera jugador del Athletic hasta su abrupta salida en el verano de 2013, decidieron ponerse en contacto con el propio director deportivo para que este activara una operación que no cuajó por la negativa de tres miembros de la Junta Directiva. Aunque lo que se deduce de las palabras del director deportivo es que de no haber existido tal llamada nadie habría movido un dedo para fichar a Llorente, la realidad es que fue el atacante quien dio el primer paso. Un intento que terminó siendo un paso en falso, otro más, de los regidores del club. Un Athletic en el que la figura del presidente no tiene el poder que se le presupone y que debería tener, y en el que la postura negativa de tres miembros de la Junta, entre ellos Ricardo Hernani, presente ayer en San Mamés y que es la cabeza visible de la comisión deportiva, ha tenido más peso que la del resto de directivos, presidente incluido, dirección deportiva, entrenador y vestuario, o al menos parte del mismo.

"Ayer a la mañana, ellos (los jugadores) fueron los que iniciaron el proceso", reconoció sin tapujos Alkorta. Cuestionado al respecto, afirmó que esa tesitura, que resulta cuando menos sorprendente, ya la había vivido con anterioridad: "He visto esta situación en otra ocasión. No sé si es normal o no, pero la he visto, incluso cuando jugaba yo. Cuando hacen eso los jugadores es porque creen que se puede mejorar". En este sentido, aunque no quiso desvelar qué integrantes del vestuario fueron los que se pusieron en contacto con él -recalcó que "no es un mensaje malo" que ocurra algo así-, negó que exista distancia alguna entre los futbolistas e Ibaigane: "No hay ninguna grieta. De ningún modo. Los jugadores entienden perfectamente lo que pasa en el día a día del club y lo que pasó el lunes". Aseguró, además, que no le "desautoriza" que el intento de fichaje saliera de la caseta y no de él mismo y detalló que los futbolistas le preguntaron "si se podía" traer a Llorente porque creían que era "bueno para el equipo".

De vuelta al proceso que se vivió durante el pasado lunes, el director deportivo rojiblanco explicó, en la medida en la que pudo o quiso, que no le queda una "sensación rara" pese a que el fichaje de Llorente, con quien habló personalmente el lunes, no llegó a buen puerto: "Es un jugador que hay un momento en el que creemos que se le puede traer y de repente lo que ocurre es que el club cree que no hay que acometer ese fichaje. Fue un trajín, estoy más calvo y con el pelo más claro. Fue un día difícil. Pero no hay más historias. El club toma una decisión y yo soy parte del club". En esta línea, se mostró categórico cuando se le preguntó sobre si había sopesado dimitir de su cargo: "No lo había pensado. No me siento en ningún momento ninguneado por nadie porque esto es una decisión de club y yo soy parte de ese club. Soy leal a mi club y si ha decidido que no era el momento de acometer el fichaje de Fernando (Llorente), yo soy parte del club. Pero nada más. No me puedo sentir ninguneado en ningún momento. Si me sintiera de verdad ninguneado hubiera pensado en dimitir, pero no es el caso", agregó.

Aunque evitó reconocer en todo momento que él sí estaba de acuerdo en el regreso del delantero nacido en Iruñea, de sus palabras se intuyó que, en efecto, la operación contaba con su visto bueno: "Yo no he opinado. He dicho que el club ha decidido no acometer el fichaje de Fernando Llorente. Siempre he dicho que es un gran delantero centro y un amigo mío personal al cual le tengo mucho cariño. Yo soy parte de este club, no voy a entrar en más detalles. El club me dijo que no había consenso. Cuando no lo hay imagino que será por varias cosas, no te puedo especificar exactamente cuáles son. Lo siento. No me costó asumir que no venía. Entiendo todas las partes. Tengo que respetar todas las opiniones, mucho más las de mi club". Alkorta aclaró, además, que no está en condiciones de asegurar que el fichaje de Llorente fuera la solución a los problemas del Athletic. "No lo sabemos. Es una hipótesis. No lo sabemos. No voy a hablar ahora de lo que podría aportar Llorente porque no está aquí, es del Nápoles".

Para acabar con el caso Llorente dijo no creer que el Athletic "dejara tirado" al jugador el lunes y no se atrevió a aventurar si tratará de abordar su contratación en la próxima ventana de fichajes: "Nunca se sabe. Estamos en octubre. Dame tiempo".

Confianza en Garitano

En otro orden de cosas, referidas estas a la situación deportiva del equipo, que tras la disputa de sus primeros cuatro partidos de la temporada ocupa la penúltima posición en la tabla, Rafa Alkorta dijo que le da "pena" la "crispación" que se vive en torno al equipo: "Es verdad que está siendo mucha la crispación, es verdad que es muy pronto, que no hemos empezado bien, que la pretemporada fue difícil y hemos tenido una serie de jugadores que no han tenido los entrenamientos adecuados, que algunos no están bien físicamente para jugar de la manera que queremos jugar, que es siempre en campo contrario€ No podemos ocultar ahora que el equipo no está bien, pero es un gran equipo y tenemos un gran entrenador; un trabajador incansable. Estamos seguros de que vamos a salir adelante y vamos a acabar arriba".

No ocultó que la situación no es la idónea, "es cierto, no podemos escondernos", pero lanzó un mensaje tranquilizador: "Llevamos unos partidos que no ganamos en casa. Nuestra gente nos da mucho, nos da demasiado. Nos tenemos que acostumbrar a que no les tenemos y estoy seguro de que seguiremos ganando partidos en San Mamés, pero para nosotros está siendo especialmente difícil jugar sin público en casa".

Por último, Alkorta apuntó a la fortaleza del grupo para sacar al equipo de la dinámica negativa: "Todo el mundo está unido. Y, además, sabemos que cuando las cosas van peor este vestuario más se une y más va a estar con el entrenador".

"Siempre he dicho que Llorente es un gran delantero centro, un amigo mío personal"

"Hay un momento en el que creemos que se le puede traer y es el club el que cree que no hay que ficharle"

"Cuando las cosas van peor este vestuario más se une y más va a estar con el entrenador"

Director deportivo del Athletic