- Dani García (Zumarraga, 24 de mayo de 1990) dice que vive su mejor año en Primera División, comparte los miedos generados por la pandemia del covid-19, pero el centrocampista del Athletic promete un total compromiso para estas once jornadas que restan de liga y que se disputarán a puerta cerrada.

¿Qué le dice el cuerpo a pocas horas del regreso a la liga?

—Vuelven esas mariposas en el estómago después de tres meses sin jugar, con ganas de volver a competir y ver cómo estamos realmente.

Han sido tres meses largos. ¿La incertidumbre se ha convertido en el peor enemigo?

—Esa incertidumbre inicial por la pandemia queda lejos, ya es un proceso que has asumido y estás centrado en el día a día, aunque eres consciente de que igual no llegamos aún al cien por cien, pero sí hemos entrenado para encontrarnos lo mejor posible.

¿A qué porcentaje se ve Dani García, que es un jugador con un perfil que exige su desgaste en la medular?

—En estas dos últimas semanas la verdad es que me he encontrado muy bien y, aparte, yo soy un jugador que se podría decir diésel frente a otros que sí son más explosivos. Tengo buenas sensaciones, pero una cosa es lo que percibes a lo largo de los entrenamientos y otra lo que te exige un partido, en ritmo, movimientos€

La patronal de los clubes ha apostado por el regreso de la competición sí o sí porque hay mucho dinero en juego. ¿Se siente el futbolista como una mercancía?

—El retorno del fútbol beneficia, como dices, al negocio que le rodea, pero también es una forma de evadirse de todo lo que está pasando. Hay que asumirlo con normalidad, yo veo gente en los bares, en las terrazas, en las playas€ Y si puede volver el público cuando antes a los campos, mucho mejor. Nos han hecho bastantes pruebas médica para descartar riesgos a la hora de jugar y esperemos que así sea, que no haya contagios.

¿Comparte entonces la opinión de José Luis Mendilibar, al que conoce muy bien, de no entender que no se permita un aforo reducido cuando las terrazas están llenas?

—En esa disputa entre si hay que permitir público o no es complicado tener una verdad absoluta. De aquí a que termine la temporada, con un poco más de un mes de diferencia, y si no hay otros rebrotes de la enfermedad y podemos ir mejorando, sería la leche que se pudiera jugar con público.

¿Teme contagiarse?

—Más miedo me da que se contagien personas con riesgo y muy cercanas a la familia. Yo llevo un control absoluto, que he respetado lo que me han dicho que respete y las pruebas por las que he pasado te dan esa seguridad para seguir adelante.

Pero el fútbol es un deporte de contacto. ¿Se va a meter la pierna con la misma intensidad que con anterioridad a la pandemia?

—Los estudios dicen que se está metiendo menos la pierna, pero yo entrenando me exijo lo suficiente como para meter la pierna el fin de semana y a la hora de competir nadie piensa en no meter la pierna. Yo no me lo voy a pensar y voy a meter la pierna a muerte como siempre.

Y no le digo respecto a las disputas en el área pequeña a balón parado.

—Pues sí, pero al final hemos pasado los test requeridos para gozar de esa serenidad en el campo.

El presidente del Athletic ha estimado unas pérdidas entre 30 y 40 millones de euros a causa de la pandemia. ¿Qué mensaje recibe el vestuario de estas cifras?

—Nosotros hemos puesto nuestro granito de arena por el club, las pérdidas no gustan a nadie pero ha sido común en todos los sectores y en el fútbol también es normal que hubiesen.

Se han bajado el 6% del sueldo con el regreso de la liga y en caso contrario hubiera sido del 17%. ¿Es un porcentaje acorde a lo que está sucediendo a la mayoría de la sociedad?

—Es un porcentaje normal, creo que sí. Hemos aportado nuestro granito de arena, también sabemos que somos unos privilegiados que ganamos bastante dinero, pero siendo consecuentes con la decisión. Ha sido fruto de un acuerdo entre todos.

Vuelve la liga, pero con las gradas vacías. ¿Qué sensación tendrá ante el Atlético de Madrid? ¿Ha jugado en alguna ocasión a puerta cerrada?

—No. Se entiende que será algo más frío que lo normal, pero si se gana, esa extraña sensación se pasa mejor.

Se oirá el eco, quejas, juramentos€

—Dicen que la televisión va a poner un sistema de sonido para que no se escuche todo lo que se dice en el campo, pero yo sinceramente cuando me meto en el partido no sé si hay eco o no lo hay. Estar concentrado te permite evadirse de estar jugando sin gente.

Emerge la incógnita de cómo va a responde el equipo en un San Mamés vacío cuando el público aporta su plusvalía en el empuje.

—Todos los equipos van a sufrir lo mismo. Nuestra afición nos da mucho y lo sabemos, pero creo que tenemos un objetivo por delante y llevarlo a cabo sería una gran recompensa para toda la gente que no puede venir al campo.

¿Realmente ve posible la conquista de la séptima plaza?

—Creo que sí. Estamos a cinco puntos, hay 33 en juego y tenemos que intentarlo. Sabemos que no va a ser fácil, con muchos partidos seguidos sin descanso, pero por esfuerzo no va a ser.

Cuatro partidos en un intervalo de diez días, una saturación de la que ya ha protestado el capitán, Iker Muniain. ¿Cree que les puede pasar factura en este tramo inicial, que podría ser decisivo?

—Tenemos una plantilla amplia y de calidad, pero lo que nos parecería normal es que todo el mundo tuviera más o menos el mismo cansancio, sin embargo esperamos que se regule con el resto del calendario y si a nosotros nos ha tocado jugar de seguido en este inicio, pues que luego les toque a otros. No por quejarnos nos van a cambiar los horarios.

¿Se corre el riesgo de que si los resultados no acompañan en estas cuatro jornadas, el equipo se deje llevar con un sabor de fracaso?

—Ganemos o perdamos estos partidos venideros, no nos vamos a dejar llevar nunca. Estamos jugando por este club y no nos da igual ganar o perder. ¿Sabemos que si no lo conseguimos va a ser una desilusión para todo el mundo? Sí, pero vamos a dejarnos todo para que no sea así.

Está la experiencia de cómo se escapó el objetivo la liga pasada y además usted nunca ha jugado en Europa.

—Fue un final muy doloroso, pero son cosas del fútbol. También hay que estar preparados para cuando llegan las derrotas. Está ya olvidado y este año ha sido muy bueno, hemos llegado a la final de Copa y todavía tenemos el objetivo de conseguir la plaza europea.

¿Le ha dado muchas vueltas durante el confinamiento a la final de Copa en La Cartuja?

—No, porque ya sabíamos que no se iba a jugar. Lo tienes un poco dejado de lado y cuando llegue, ya nos centraremos en ella, porque ahora tenemos otros retos por delante.

Una final de Copa de la que ase ausentarían dos referentes como Mikel San José y Beñat que acaban contrato. ¿Cómo se está gestionando en el vestuario estos dos casos?

—Son personas muy queridas y se lleva con la máxima normalidad que se pueda llevar. Son casos complicados y saben que nos van a tener para lo que necesiten.

En este parón se ha conocido la renovación de Gaizka Garitano, una noticia que aplaudirá porque es un entrenador que le ha marcado.

—Aunque me haya marcado lo que me ha marcado, creo que hablando de lo que ha hecho se lo ha merecido por lo que ha conseguido con todo su trabajo. Cogió al equipo en un momento muy complicado y casi lo mete en Europa, mientras que este año nos ha metido en una final de Copa y estamos a cinco puntos de Europa. Es más mérito de él y me alegro mucho, tanto por él como por su equipo técnico y ojalá logremos más cosas juntos.

¿Es de los que les gusta hacer autocrítica?

—Claro que sí. La hago, pero este año estoy siendo más regular que el pasado y está siendo uno de mis mejores años en Primera. Sé que tengo mucho que mejorar y aportar al equipo, pero estoy contento con mi nivel.

Se dice que Dani García es la voz de Garitano en el césped. ¿Es así?

—La mía es una posición importante para dar equilibrio al equipo e igual Gaizka ve ese reflejo en mí, pero no soy más importante que nadie de mis compañeros. Sí me gusta mandar, estoy prácticamente bien colocado, y ordenar a mis compañeros, porque con la gente que tengo por detrás tengo un poco más de libertad.

Es un futbolista al que no le han regalado nada y recuerdo su época tanto en el Alicante como en el Getafe B, muy dispar a la actual. ¿Que queda de aquel Dani García?

—Queda mucho todavía, aunque como futbolista he evolucionado mucho y como persona creo que la madurez en el fútbol te da un plus mayor, porque controlas mejor las emociones y los tiempos del partido.

Solo ha marcado tres goles como futbolista profesional. ¿Lo considera un déficit?

—Claro que lo considero un déficit. Sé que no es mi trabajo meter goles, pero podría aportar mucho más en ese aspecto. Quiero mejorar y esa es una faceta en la que lo quiero hacer.

Acaba de cumplir 30 años (el pasado 24 de mayo), ¿se ve el presente y el futuro de diferente manera cuando se llega a esa barrera vital?

—Ahora estoy en el mejor momento de mi carrera y solo miro al presente. No pienso en lo que vaya a venir. Físicamente me encuentro bien o ojalá pueda seguir tantos años como Aduriz. Disfruto mucho con mi profesión y con el día a día.

Le quedan dos años más de contrato y a nadie le extrañaría que el club le ofreciera la renovación.

—Cada uno lo tiene que demostrar en el campo y si el club cree que merezco una renovación, nos sentaríamos a hablar, porque es lo yo más quiero. Pero para ello, uno se lo tiene que merecer y que el club crea que lo mereces.

Por curiosidad, ¿se convirtió en una pesadilla aquel error grueso que cometió la liga pasada ante el Valladolid en San Mamés?

—Los errores no los superas hasta que llega el siguiente partido, si haces un partido bueno y el equipo gana, lo olvidas fácilmente. En el fútbol un día estás arriba y otro abajo, y cuando estás abajo lo mejor es tener un partido cerca para olvidarlo. Sí, ese error lo tuve varios días en mi cabeza, porque se produjo justo antes de las navidades.

Quiero finalizar de nuevo con el tema social. ¿Qué reflexión hay que hacer con el rebrote de casos en el Hospital de Basurto?

—Nos han dado una libertad últimamente e igual de coger la mano hemos cogido el brazo, de ahí puede venir el brote. No puedo decir más, porque no soy un experto, pero esperemos que se quede en solo un accidente y no nos salgamos del buen camino que habíamos tomado.

El mensaje de un personaje público puede calar y hay temor a que se generen aglomeraciones mañana en los aledaños de San Mamés.

—Con todo lo que hemos pasado, todo el mundo tiene que ser responsable. Nosotros cuando vamos en el autobús y vemos a gente, nos anima mucho, pero también respetando todas las normas que hay que cumplir.

"Somos unos privilegiados que ganamos bastante dinero, pero consecuentes con la rebaja del sueldo"

"Cuando me meto en el partido no sé si hay eco o no lo hay. Estar concentrado permite evadirse"

"Veo gente en los bares, en las playas€ Y si puede volver el público cuando antes a los campos, mucho mejor"

"Aunque Gaizka me haya marcado lo que me ha marcado, creo que se merece la renovación"

"Si el club cree que merezco una renovación, nos sentaríamos a hablar, porque es lo yo más quiero"

"Nos han dado libertad e igual de coger la mano hemos cogido el brazo, de ahí puede venir el brote de Basurto"