La UEFA ha confirmado a la Federación Española de Fútbol que esta será la responsable de la fase final de la Champions League femenina, que se celebrará del 21 al 30 de agosto en Euskadi, concretamente en Bilbao y Donostia, a pesar de que estaba previsto que la final se organizara para el pasado 24 de mayo en Viena, Austria, donde fue cancelada por la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia de coronavirus. Así, el fútbol femenino más destacado del continente europeo aterrizará en el territorio vasco.

La fase final es un play-off a partido único que disputarán ocho equipos y tendrá dos sedes: San Mamés y Anoeta. Los emparejamientos serán Atlético de Madrid-Barcelona y Olympique de Lyon-Bayern de Múnich por una rama del cuadro, mientras que la otra estarán los duelos Glasgow City-Wolfsburgo y Arsenal-Paris Saint Germain. De este modo, se disputarán cuatro partidos correspondientes a los cuartos de final, posteriormente se celebrarán los dos partidos de semifinales y por último, la final. Por lo tanto, Euskadi acogerá un total de siete encuentros.

Está previsto que tres partidos se jueguen en San Mamés y que otros tres se desarrollen en el Reale Arena. Por el momento, no está decidido cuál de los dos estadios acogerá la final. Respecto a las fechas de la fase definitiva, los cuartos de final se disputarán los días 21 y 22 de agosto; las semifinales serán el día 26; el desenlace será el día 30.

A estas alturas la incertidumbre es si los partidos se jugarán a puerta cerrada o si habrá público, al menos en parte de los asientos de los estadios. De no permitirse el acceso a las gradas, el impacto económico de esta fase final será más bien escaso, aunque permitirá a Euskadi mostrar su apuesta por la promoción del fútbol femenino.

No obstante, en el fútbol masculino, en LaLiga, ya se comienza a contemplar la posibilidad de que en el mes de julio puedan darse los primeros ejemplos de estadios acogiendo a público. De ser así, en agosto habría más argumentos para la celebración de encuentros con espectadores en las gradas. En cualquier caso, la decisión quedará pendiente de la evolución del covid-19.

En el plano deportivo, los equipos llegarán después de atravesar diferentes situaciones. Los únicos que han retomado la competición liguera han sido los alemanes, el Wolfsburgo y el Bayern de Múnich, que finalizarán la liga a finales de junio. En el caso de otros cinco contendientes, sus respectivas ligas -española, inglesa y francesa, que alberga al vigente campeón, el Lyon- fueron suspendidas. Mientras, el Glasgow City desconoce aún si la liga escocesa finalmente se reanudará, y de hacerlo podría incluso llevar partidos al mes de agosto. Por ahora, con este panorama, a priori los más favorecidos son los dos conjuntos germanos. Pero el escenario podría terminar siendo más favorable para el combinado escocés. Desde luego, Atlético, Barcelona, Arsenal, PSG y Lyon no contarán con un contexto amable.

La decisión que ha adoptado la UEFA de trasladar a Euskadi el epílogo de la Women’s Champions League hace pensar que difícilmente España podrá acoger la final masculina de la competición continental en el caso de que Estambul renuncie a ser la sede, lo cual es posible. Lisboa y Múnich han pasado a convertirse en las dos ciudades mejor postuladas como posibles relevos de la capital turca.