Ayer Ángel Villacampa hizo bueno el dicho de cuando el río suena... agua lleva. Y es que el recién renovado técnico del Athletic admitió en rueda de prensa el interés del Real Madrid por hacerse con sus servicios para la próxima temporada: "No todo lo que no se consigue quiere decir que sea mentira, pero yo había dado mi palabra al Athletic, me siento muy comprometido con el club y quiero seguir vinculado a él sobre todo porque este es un trabajo inacabado". El entrenador toledano reconoció que el principal motivo por el que amplió su unión con el club rojiblanco es que siente que la crisis sanitaria dejó sin concluir un proyecto que comenzaba a coger forma: "Hemos acabado la liga de forma muy atípica, tuvimos el parón justo en nuestro mejor momento: estábamos en semis de Copa, en una clara tendencia hacia arriba y con un gran rendimiento... lo que hace de este un proyecto inacabado en el que todavía quedan muchas cosas por hacer".

A pesar de todo, Villacampa dijo estar orgulloso por el interés del conjunto blanco mientras que agradeció al Athletic "su confianza en mí para seguir dirigiendo a esta familia". Porque el técnico llegó a Bilbao con muchas ganas de conseguir algo grande con el club rojiblanco, unas ganas que el parón provocado por el covid-19 no ha hecho más que agrandar: "Ahora tenemos todavía mucha más motivación, sabemos que va a ser complicado volver, pero hacerlo de forma óptima será un reto mayúsculo".

El técnico del Athletic se encuentra, pues, en plena planificación de la próxima temporada, una campaña en la que podría no contar con Damaris Egurrola y Maite Oroz, dos futbolistas sobre las que también circulan rumores de salida al nuevo Real Madrid: "Sus números dicen lo importantes que son para nosotros, son jugadoras con más del 90% de los minutos jugados y es normal que grandes clubes se fijen en ellas. No sé nada de su situación actual, pero ojalá se queden con nosotros". Sin embargo, Villacampa reconoció que tiene un plan B para todo, incluyendo la marcha de estos dos pilares. Y es que uno de los objetivos que se impuso a su llegada al Athletic es el de rejuvenecer una plantilla gracias a la cantera: "Si Damaris y Maite no están con nosotras pues estarán jugadoras del B a las que podremos seguir formando porque hay que dar oportunidades a las que piden paso, ya que algunas ya demostraron que son muy válidas para nuestro futuro".

Con todo, en plena preparación del próximo curso, Villacampa admitió que le hubiera gustado terminar en el campo su primera temporada con el Athletic: "Me hubiera gustado acabar la liga y competir por lo que pretendíamos desde un principio, pero el presidente de la Federación dijo que se acababan todas las competiciones sin play-off y lo hemos acatado".

A pesar de que la Primera Iberdrola se canceló por la crisis sanitaria, Villacampa anunció ayer que el Athletic volverá en breve a los entrenamientos: "No sabemos en qué campo va a ser, pero lo haremos al menos durante tres semanas para que cuando volvamos a empezar la pretemporada no llevemos tanto sin entrenar y podamos hacerlo con garantías. No será lo mismo que estar cuatro o cinco meses paradas". Por ello, tanto jugadoras como cuerpo técnico se someterán hoy a los test PCR para poder retomar las sesiones preparatorias cuanto antes de cara ya al curso que viene: "La próxima temporada es un mar de dudas porque no sabemos si empezaremos en septiembre o en octubre, entonces intentamos planificarla según los dos escenarios; pero es muy complicado adivinar cuál será, así que ojalá se pueda resolver pronto para llevar a cabo una panificación acorde", concluyó Villacampa la rueda de prensa virtual.

"Damaris y Maite son jugadoras importantes y es normal que grandes clubes se fijen en ellas"

Entrenador del Athletic