Bilbao - El impacto de toda una semifinal de Copa, la cual "no se juega todos los días", como advirtió Gaizka Garitano el martes en Lezama, empujó al técnico rojiblanco a vivir con suma intensidad el desarrollo de un partido que los leones, a pesar de ganar y no encajar gol, finalizaron con "malas sensaciones". Así lo reconoció el propio Garitano en rueda de prensa, donde cargó contra la decisión arbitral, VAR mediante, de anular el gol de Ander Capa por supuesto fuera de juego posicional de Iñaki Williams. El entrenador derioztarra, profundamente molesto, no entendió la decisión de Hernández Hernández, llamado por Mateu Lahoz a revisar la acción en el monitor, toda vez que "nos han quitado un gol legal que nadie en el campo sospechaba que se pudiera anular, porque ni siquiera ellos lo han protestado".

"Nadie se ha quejado y nosotros hemos visto que el gol era legal, pero ha vuelto a entrar el VAR y no estamos teniendo suerte en ese sentido", apuntó asimismo el de Derio, que también criticó el reparto de cartulinas amarillas -tres al Athletic y dos al Granada- en un choque en el que "nadie ha visto tampoco que nosotros acabáramos con más amarillas que ellos". La recibida por Dani García, además, impedirá al mediocentro de Zumarraga estar presente en el partido de vuelta que se disputará el próximo 5 de marzo en el Nuevo Los Cármenes, si bien "esa amarilla me ha parecido justa, pero luego han venido otras que también lo eran, como una de Machís", lamentó Garitano. "Dani será baja, pero jugará otro", se limitó a indicar respecto a la ausencia por sanción del 14 del Athletic el propio técnico vizcaino, quien no escondió su descontento "por lo que todos habéis podido ver".

Además del arbitraje, no en vano, el resultado con el que tocó a su fin el partido dejó contrariado al timonel de la nave bilbaina, quien reconoció que "ningún jugador está contento", dado que "el 1-0 es corto para lo que se ha visto en el campo". "Hemos estado bien, hemos sido nosotros mismos y hemos jugado a un ritmo muy alto desde el principio", valoró Garitano, quien afirmó que "en el primer tiempo el equipo ha estado muy bien y en el segundo es cierto que nos ha costado un poco más juntar pases, pero hemos vuelto a crear ocasiones suficientes para hacer un segundo gol".

"También hemos defendido bien, porque sabíamos que mantener la portería a cero era importante y que teníamos que tener nuestras pequeñas precauciones al final", expuso el técnico rojiblanco, que incidió en el bajo estado de ánimo de sus pupilos tras el encuentro, toda vez que "nos cuesta muchísimo hacer gol y si encima que lo hacemos, nos lo quitan, todavía estás más cabreado".

"Cuando pasen un par de días valoraremos que el resultado es bueno, pero ahora mismo ya digo que no tengo a nadie contento en el vestuario por cosas que han pasado", subrayó en su versión más crítica el derioztarra, que valoró positivamente el paso al frente dado por Iñaki Williams en los últimos partidos y dejó claro de cara al partido de vuelta que albergará Los Cármenes que "aunque hubiéramos ganado 2-0 la eliminatoria seguiría abierta, al igual que si hubiéramos perdido 0-2".

el domingo, osasuna Con la semifinal de Copa destinada a quedar en un segundo plano durante las próximas semanas, Garitano no dudó en agradecer una vez más el incondicional apoyo recibido por la afición en un San Mamés a rebosar y destacó, en relación al estado físico de sus jugadores, que "esta apuesta por la Copa está siendo muy bonita, porque es un chute para todos, pero nos está haciendo mucha mella en liga y todo el mundo tiene que estar mentalizado de que el partido del domingo contra Osasuna es muy importante".