LEZAMA. "Nos hace una ilusión de la leche cada semana estar en Europa. Pero no hacemos números con los puntos con los que tenemos que llegar al final. Sí lo hacemos con un partido. Nos hace ilusión vernos cada semana en esa clasificación", dijo el jugador guipuzcoano.
"Nunca he jugado en Europa. Es un reto que tengo por delante y me haría una gran ilusión", confesó, envidiando en ese aspecto al entorno del equipo bilbaíno. "Todos los que estáis aquí habéis visto al Athletic en Europa. Y casi todos mis compañeros han disfrutado de ello", valoró el medio centro titular de un Athletic sexto en la tabla aún habiendo perdido el domingo en el Benito Villamarín.
Respecto a esa derrota (3-2), con los tres goles recibidos en los 20 primeros minutos del encuentro, comentó que, como "siempre que pierdes, tienes ganas de que llegue rápido el próximo partido para quitar el mal sabor de boca".
Y apuntó que ese choque no refleja la temporada que está haciendo el Athletic. "Aunque fue un batacazo, vamos por el camino correcto y no hay que desviarse por un partido", consideró.
Ya con respecto al choque ante su exequipo, en lo sentimental lo ve "más especial en Ipurua", aunque reconoce "jugar contra amigos siempre es especial".
En lo deportivo, admite que, aunque el Eibar "está necesitados", ellos "en casa siempre estamos obligados a ganar". "Nos tomamos los partidos de San Mamés como una final", recordó, aún seguro de la peligrosidad del conjunto armero.
"Venga el primero en la clasificación o como está ahora, juega siempre igual. La manera de Mendilibar no cambia nada, son intensos y con una presión alta", alertó, avisando también de que el Athletic trabaja "para salir de la presión" a la que somete el Eibar.
"Nosotros estamos muy bien, menos en el último partido, que no salió como queríamos. Pero estamos fluidos e intensos, llegamos bien a los minutos finales y mentalmente también estamos con mucha confianza", resumió sus sensaciones de cara al choque.
