Bilbao - El entrenador del Celta, Fran Escribá, afronta el partido ante el Athletic consciente de que una derrota podría costarle el puesto, si bien es un escenario en el que el técnico valenciano prefiere no pensar, al entender que su equipo necesita “tranquilidad” y que “no hay cosas tan malas en el camino”. “Si hago un análisis global de los siete partidos, rescato muchas cosas positivas del equipo y solo echo de menos los tres puntos del partido contra el Granada, en el que no nos dejaron competir. Con esos puntos estaríamos con nueve y, posiblemente, no hablaríamos de nada de esto”, subrayó el propio Escribá en la rueda de prensa previa al choque ante el conjunto rojiblanco, del que elogió su capacidad para competir en cada encuentro.

“Es un equipo muy intenso siempre y que nunca baja los brazos. Tiene un estilo similar al que nos encontramos en Ipurua con el Eibar”, explicó el técnico celeste, quien agregó en relación al Athletic que “te exige mucho, siempre te lleva a partidos muy ajustados no solo de juego, sino también de resultados y es difícil ganarle”. “No solo históricamente, porque en los últimos años ha jugado en Europa o ha estado cerca”, puso en valor asimismo Escribá, quien abogó por la calma al ser cuestionado por un sector de la afición del Celta. “Lo que no tiene que haber es intranquilidad. Cuando llegué el año pasado había intranquilidad y preocupación y era lógico, porque solo quedaban doce jornadas y el equipo estaba en caída libre. El premio negativo muy gordo de irse a Segunda estaba ahí, pero ahora quedan 31 jornadas. No hay tiempo, queremos reaccionar ya, pero solo llevamos siete jornadas”, reflexionó el técnico valenciano, contra las cuerdas antes de recibir al Athletic. - A. Aramendia