bilbao - Su irrupción ha sido brillante. Le va, incluso, todo muy rápido. Unai López es quizá el jugador de moda del Athletic. No lo es por su impacto goleador, ni por una cualidad determinada. Lo es, sobre todo, porque se trata de la nueva joya de la corona de Lezama, lo que se aplaude a rabiar en el entorno rojiblanco, profundamente orgulloso de su cantera y de su filosofía. El donostiarra encarna ese aire fresco que se reclama cada nuevo curso. Y además lo hace por la puerta grande, porque así se debe entender que debutara como león en un encuentro grande y en momento decisorio del mismo. Fue en el histórico enfrentamiento ante el Nápoles que supuso el billete a la fase de grupos de la Champions, cuando el benjamín de la plantilla compareció en San Mamés con el 2-1 en el marcador y todo aún por decidir.

El Athletic, no obstante, sabe lo que se tiene en manos. Unai López, que se encuentra concentrado con la selección española sub’21 y que no se reincorporará a la disciplina del equipo hasta el miércoles lo mismo que Iker Muniain, es un valor de presente y futuro, por lo que el club no duda en acentuar un blindaje que ya llevó a cabo en primera instancia el pasado diciembre, cuando prolongó su contrato hasta el 30 de junio de 2016. Su debut en el primer equipo le ha relanzado profesionalmente, por lo que Ibaigane aplica de forma automática la opción que se reservó para añadir una campaña más a su actual relación, que se extiende a 2017.

Una ampliación que impacta directamente en la cuantía de la cláusula de rescisión de su nuevo contrato, que se eleva a 20 millones de euros, una cifra muy considerable para un recién llegado a la élite que el próximo 30 de octubre cumplirá solo 19 años de edad y con un único recorrido de 40 minutos en el primer equipo. En el Athletic se sienten reconfortados por el compromiso adquirido por un jugador que contaba con ofertas de clubes importantes la pasada temporada. “Unai, sin embargo, no ha dudado en quedarse aquí”, recalcan las fuentes consultadas, que enfatizan el crecimiento que ha experimentado.

apuesta segura Unai López asoma como una convincente apuesta de la anterior cúpula de Lezama, que fichó al centrocampista de la Real Sociedad, en la que afrontaba su último año en categoría cadete. Entonces, el jugador y su familia tenían libertad de elegir equipo al no haber cumplido los 16 años. El de Donostia aceptó la atractiva oferta del Athletic, que le seguía la pista desde tiempo atrás, lo que sentó muy mal en la entidad realista, que reaccionó con veladas críticas hacia Ibaigane, sobre todo por medio de la figura de Bittor Alkiza, exjugador rojiblanco y actual segundo entrenador del conjunto realista..

Desde que recalara en Lezama en julio de 2011 ha dado continuos pasos agigantados en su progresión. La dirección deportiva le ha seguido con lupa, conocedora de que manejaba un futbolista con un gran talento que no tardaría en llegar a debutar como león. El propio Ernesto Valverde se quedó prendado de sus prestaciones hace un año, cuando le reclutó para un amistoso en Lasesarre y donde el donostiarra deslumbró en los 46 minutos que completó ante el Barakaldo.

Doce meses después, Unai López ha respondido a las expectativas que se tenían depositadas en Lezama, especialmente porque Valverde quizá haya acortado los plazos tras la fuga de Ander Herrera. La Junta Directiva cuida su caso y ya se plantea ofrecer un nuevo contrato al jugador en función de su progresión a corto y medio plazo.