bilbao. Si el halago debilita y el éxito confunde, tal y como acentúa el credo de Marcelo Bielsa, el Athletic debe estar en los huesos y desorientado un día después de situarse en la primera línea del escaparate del planeta futbolístico, que recibió con honores y vítores el exquisito y autoritario despliegue del Athletic en Old Trafford por entusiasta, pizpireto y valiente. Si el resultado, corto, explica una parte del relato, lo que verdaderamente amplificó la dimensión de la victoria del Athletic fue el modo de conquistarla, los versos que empleó para escribir una de las páginas más brillantes de su longeva historia, repleta de tomos. Old Trafford y el 8 de marzo de 2012 quedarán grabados a fuego en la memoria colectiva como un flechazo absoluto por el fútbol. También por el éxodo de 8.000 gargantas que cuidaron del Athletic a cada fotograma en el Teatro de los sueños, un templo del fútbol donde se evidenció la realidad de un equipo que aún en fase de crecimiento, cuyo margen de mejora no se adivina, fue capaz de pintarle la cara al Manchester United, al que golpeó con un fútbol irresistible.

La prensa inglesa, turbada por el espectáculo y la lección de fútbol de la muchachada rojiblanca -"cómo juegan, qué partidazo", dedicaban varios periodistas ingleses a la conclusión del duelo a sus colegas-, dedicó al Athletic el calificativo de "glorioso" y fueron numerosos los que describieron a los bilbainos como el mejor equipo que había hecho pie en Old Trafford durante el presente curso. La lisonja -Bielsa fue el primero en rebajar el octanaje de la euforia porque no quiere distracciones de ninguna clase- es el único efecto perverso que se advierte del incuestionable triunfo del Athletic en el Teatro de los sueños, donde agarrado a su juego de salón: tan poético como radical, tan promiscuo como vertical, tan sincronizado como desatado, zarandeó al Manchester United como si el vigente subcampeón de Europa, que purga ahora sus pecados tras desbarrancar de la Champions, se tratara de un equipo menor, un guiñapo asfixiado por las tenazas de un gigante.

El irreprochable ejercicio de estilo desarrollado por el Athletic en el museístico Old Trafford, donde su actuación dejó la huella de lo imborrable, impactó con los flashes de lo memorable en los ojos del Viejo Continente, seducido la noche del jueves por un equipo que se intuye capaz de lo extraordinario por su insultante juventud, irreverencia y descaro futbolístico, siempre vertiginoso. Una escuadra, la de Marcelo Bielsa, que desconoce los complejos sea cuál sea el ascendente del equipo al que se enfrenta. Ese fue el punto de apoyo por el que hizo palanca. Refractario al tronío del United, el Athletic convocó lo mejor de su catálogo, que no es poca cosa y a cada actuación engorda, para descascarillar al Manchester, un desafío mayúsculo que resolvió con nota.

felicitaciones Así lo entendió la gente de Manchester, relató uno de los rezagados entre los 8.000 aficionados que siguieron la estela del Athletic hasta Old Trafford. "A cada paso se nos han acercado hinchas tanto del City como del United para felicitarnos por el partido que hizo el Athletic. Nos han dado la enhorabuena. Nos han dicho que era alucinante ver cómo jugó el Athletic contra el Manchester. De hecho, más de uno nos ha comentado que el Athletic es el mejor equipo que han visto este año en Old Trafford y que para ellos el resultado fue lo mejor del partido".

La mirada de los ciudadanos se correspondió con la autopsia de los medios de comunicación, que enfatizaron el logro del Athletic. El Daily Mirror se refirió a la actuación rojiblanca con un juego de palabras muy nítido. "Rocky Bilbao", decía el titular de su crónica del partido entre el United y el Athletic, comparándolo con el nombre de Rocky Balboa, el boxeador que representó Sylvester Stallone en el cine. Otro rotativo señalaba el duelo como "Old Trafford jinx", presentando la victoria bilbaina como el "gafe" de Old Trafford bajo las instantáneas que recogían las celebraciones de los tres goles del Athletic. Por su parte, The Sun se descolgó con un elocuente: "Los leones devoran a los diablos rojos". Ya en la crónica exponía que el "United vivió una noche de pesadilla" a pesar de la "actuación heroica" de David de Gea, el socorrista que evitó la goleada y el sonrojo absoluto de Alex Ferguson, cuya escuadra palideció ante los bilbainos. "El fútbol de toque del Athletic descomponía al Manchester United una y otra vez", reprodujo The Sun.

"oleada de fútbol" "El equipo de Marcelo Bielsa llegó desprendiendo energía e historia y, sencillamente, fue superior. Acaparó la posesión con agresividad y dominó al United con una oleada de fútbol", describía el diario The Independent, que relataba que Bielsa ha sabido ensamblar en su equipo el "histórico juego físico" del Athletic con una "gran complejidad táctica". El resultado de esa combinación es un "juego de metrónomo" que hizo sucumbir a los ingleses ante el "talento de unos jugadores técnicamente superdotados", apuntó el diario. The Telegraph, al igual que otros periódicos, también situó el foco sobre Llorente, un jugador al que describieron como "poco convencional" y que combina "el poder y la estatura" de los delanteros centros típicos del fútbol inglés con un "toque y un movimiento francamente superiores". El primer gol del Athletic mezcló ambos perfiles de Llorente, ingobernable para sus marcadores, incapaces de encimarle y que perdieron todos los duelos individuales que mantuvieron con el ariete. "Un Athletic glorioso domina al United", tituló The Times, que expuso que fue un partido "que desafía a toda lógica" y señaló el triunfo rojiblanco como una "merecida victoria" de los vascos.

"un baño de fútbol" La impronta de la actuación del Athletic también alcanzó a otros países europeos en los que se venera el fútbol. "En España hay algo más que Real Madrid y Barcelona", indicó el rotativo francés L'Equipe para referirse a la histórica victoria del conjunto de Bielsa en el legendario Old Trafford, una de las cunas sagradas del fútbol. La publicación gala equiparó el juego desarrollado por el Athletic "que confiscó la pelota" con el del armónico y sofisticado Barça, la mejor maquinaría de fútbol jamás vista. En la misma crónica, L'Equipe, la Biblia del deporte francés, subrayó la decisiva aportación de De Gea, símbolo de la resistencia del United en el Teatro de los sueños frente a la incontinencia rematadora de los rojiblancos. "Sin él, el resultado hubiera sido más abultado en favor del Athletic".

La Gazzetta dello Sport, el principal periódico deportivo de Italia, fue más allá al relatar la poderosa y convincente actuación del pelotón de Marcelo Bielsa sobre el escuadrón de Alex Ferguson, retratado por el dispositivo organizado por el argentino con pelota, pero sobre todo sin balón donde el Athletic fue infinitamente mejor que el Manchester cuando se trataba de la presión, los relevos, las permutas, la colonización y la creación de espacios y superioridades. "En España lo llaman baño de fútbol", arrancó la crónica sobre el duelo que Manchester y Athletic mantuvieron de Old Trafford. El rotativo italiano no se detuvo ahí y aseveró que la del Athletic fue "una lección de fútbol en la que Bielsa se ha mostrado como un maestro ante un Ferguson al que no le quedó más que apuntar en su cuaderno".

Entre los rotativos de tirada estatal la radiografía resultó unánime. El País realzó la victoria del Athletic con un titular muy elocuente. "El Athletic sonroja al Manchester". En Marca, cuya portada ofrecía una foto a cinco columnas (en ella aparecían De Marcos, Llorente e Iñigo Pérez, en pleno festejo) con el titular de "Exhibición". En el interior, Santi Segurola, seguidor confeso del Athletic, coincidía con The Times en su apreciación y encabezó en la crónica con "Glorioso Athletic".