- A pesar de los intentos de Grecia y Chipre de dar minutos al conflicto con Turquía en la cumbre europea extraordinaria del pasado miércoles el debate tendrá que esperar hasta septiembre. Charles Michel ha convocado una cumbre extraordinaria para el 24 y 25 de septiembre. En las últimas semanas la tensión en el Mediterráneo Oriental ha aumentado tras el envío de Ankara de dos buques de perforación y exploración de hidrocarburos a aguas reclamadas por Grecia y Chipre.

Así, el conflicto creciente entre Grecia, Chipre y Turquía tendrá que esperar casi un mes para recibir la atención de los líderes europeos. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, anunció la fecha del 24 y 25 de septiembre el pasado martes en su habitual carta de invitación a los líderes para la cumbre del miércoles. Respecto a las decisiones que podrían tomar los Veintisiete “todas las opciones están sobre la mesa”, aseguró Michel tras la cumbre.

Las conclusiones de la cumbre europea del miércoles apuntan a que “algunos Estados miembro” plantearon abrir un debate sobre “la situación en el Mediterráneo Oriental y las relaciones con Turquía”. Pero la crisis en Bielorrusia, que no es un estado miembro de la Unión ni tampoco está dentro de la lista de los candidatos, centró los esfuerzos de los líderes.

Aun así, el texto suscrito por los Veintisiete afirma que tienen una “preocupación creciente” por el “aumento de las tensiones” y subrayan la “necesidad urgente de reducir la escalada” del conflicto. Por ello han expresado su “total solidaridad” con Grecia y Chipre. Además, se reafirman en “sus conclusiones anteriores sobre las actividades ilegales de perforación”.

Desde principios de mes, Turquía envió un par de buques de perforación y exploración a zonas marítimas reivindicadas por Grecia y por Chipre. En la zona se han descubierto reservas de hidrocarburos, por lo que ha despertado el interés de los tres países. Los puntos en los que se encontrarían estas reservas están próximos a varias islas griegas, especialmente Kastelorizo, y por lo tanto según Grecia pertenecerían a su territorio. Pero Turquía argumenta que estas pequeñas islas no generan derechos de zona económica exclusiva.

La Unión impuso sanciones a Turquía por las perforaciones de gas en el Mediterráneo Oriental por primera vez el pasado mes de febrero. En noviembre creó un marco legal para poder imponer estas sanciones, que impiden los viajes a la UE, congelan los activos y prohiben hacer transacciones con empresas europeas. Tanto Europa como Turquía planean buscar petróleo y gas natural en aguas próximas a Chipre. Chipre se encuentra en la carrera -junto a Israel y Líbano- para explotar depósitos de gas en esta parte del Mediterráneo.