Bilbao - “Habrá que ver si hubo alguna advertencia de que se iban a tomar medidas con la menor y esta pudo ser una de las motivaciones”, comenta, con la prudencia de quien se halla a las puertas de un proceso que apenas acaba de arrancar, Ana Hernando Tojo, abogada de la Asociación Clara Campoamor, que ejerce la acusación popular en el juicio contra la madre acusada de matar a su hija en Atxuri.

Se pide para la acusada la prisión permanente revisable.

-Se pide prisión permanente revisable porque se califica como un asesinato con alevosía, lo que significa que para cometerlo se ha privado a la víctima de toda posibilidad de defensa. Hay dos tipos de alevosía en este crimen: la sorpresiva, porque esta niña no podía esperar que este ataque viniera de su propia madre y, por otra parte, porque el método empleado para matarla la deja en una situación de desvalimiento porque la intoxica. Aunque el asesinato con alevosía no es suficiente para imponer una prisión permanente revisable.

¿Qué lo hace posible entonces?

-Tiene que haber otra circunstancia que agrave. Según se prevé en el artículo 140 del Código Penal, cuando la víctima sea menor de 16 años se agravará la pena y se impondrá prisión permanente revisable. Al margen, tenemos otra agravante más, que es la de parentesco.

De quedar probado, sería la primera prisión permanente revisable en Bizkaia, pero no en la CAV.

-Hubo otra, la primera, que fue ratificada por el Supremo, y es la de la bebé que arrojó por la ventana una pareja de la madre en Vitoria.

Según lo que ha trascendido, la madre habría consumido medicamentos, entre ellos, un antidepresivo, así como alguna droga.

-Esta es una de las cuestiones que se va a dilucidar en el juicio. Había una serie de medicamentos de curso legal que toma y luego hay un control en el que aparece una sustancia. Nosotros vamos a argumentar que no consumía ningún tipo de droga no legal que modificara su capacidad. La defensa creo que va a ir por ahí y esta es una de las cuestiones a probar en el acto del juicio.

También se ha hecho público que la niña sufría absentismo escolar y que el caso estaba en conocimiento de los servicios sociales. ¿Tiene constancia de ello?

-Aparece en las actuaciones. En el procedimiento, a pesar de que lo solicité, no se nos dio el traslado de expediente que pudiera haber abierto, pero sí nos consta que había intervención, no sé si de Servicios Sociales de Base o del Servicio de Infancia de la Diputación Foral de Bizkaia. Según se dice en alguna parte de las actuaciones, debía de haber algún educador, con lo cual entiendo que igual se implementó una intervención educativa.

Con los datos de que dispone, ¿cree que se podría haber evitado la muerte de Kiara o no había indicios del riesgo que corría?

-Desde luego para mí algo ha fallado, porque simplemente con atender a las fotografías de la vivienda en la que vivía esta niña -el estado de falta de higiene y desorden- y a lo que se recoge en esa parte de las actuaciones con respecto al absentismo escolar, me parece increíble que no se hubiera adoptado alguna cautela o medida con respecto a esta menor. Habrá que ver también en el juicio, vía testificales, si había habido alguna advertencia a la madre con respecto a este extremo y si este pudo ser uno de los motivos, pero eso aún no se sabe.

Le parece ‘inaudito’ que no se hubieran adoptado medidas, pero aún no tiene la certeza de que no se estuviese trabajando en ello.

-Claro, porque intervención como tal sí debía haber, pero es obvio que no se había producido una orden foral para declarar en situación de desprotección o de riesgo a esta menor. Eso sí que no lo ha habido.

Todo apunta a que la menor fue intoxicada con medicamentos.

-Parece que es un caso muy sólido y que está todo bastante claro, pero hasta que no tienes una sentencia en la mano y se practica la prueba en el juicio, no puedes tener la certeza absoluta. De lo que se desprende de todas las pruebas que hay en las actuaciones, parece bastante clara la intoxicación de la menor por medicamentos.

¿Fue esa la causa de la muerte?

-La causa de la muerte es una insuficiencia cardiorrespiratoria debida, en principio, a la ingesta de los tóxicos. Hay un informe preliminar de autopsia y uno definitivo. Los forenses señalan que hay marcas en el rostro de la menor que podrían apuntar a que hubo un mecanismo externo de asfixia, pero está pendiente de acreditar.

Al parecer, se halló una nota con el texto: ‘Estoy obligando a tu madre a matar a su hija’. ¿No resulta inverosímil e infantil?

-No sé si quien comete el crimen cree que los demás son tontos o ha pensado que era una explicación plausible, pero sí que es verdad que a priori todo el argumento que da para justificar los hechos no se sostiene, es muy impreciso, incluso sin aportar grandes detalles. Entonces, ciertamente es pueril, pero no sé si está muy meditado o pensado.

Con todo, ¿qué cree que falló para proteger a esta menor?

-No me voy a aventurar porque no sé exactamente qué actuaciones se habían previsto, pero en algún momento parece que alguien debería haber intervenido.