La joven sevillana Marta del Castillo fue asesinada el 24 de enero de 2009, cuando tenía 17 años, un crimen por el que Miguel Carcaño, que había sido su novio, cumple una condena de 21 de cárcel y que 15 años después no ha caído en el olvido.

La familia de Marta ha convocado este martes, ante las puertas de la Audiencia de Sevilla, una concentración para recordar a la joven y reclamar que continúe la investigación para lograr encontrar su cuerpo, tras numerosas búsquedas infructuosas durante estos años, dificultadas por las diferentes versiones que dio Carcaño de lo sucedido esa noche.

La última esperanza de la familia de Marta era un informe pericial del teléfono móvil del asesino, que fue clonado por una empresa especializada, y sobre el que está trabajando la Policía.

En este informe se señalan hasta seis nuevos posicionamientos del teléfono de Carcaño o de su tarjeta, aunque no se puede precisar ni la fecha ni la hora en la que se registraron esas localizaciones.

El juzgado de instrucción 4 de Sevilla accedió a la petición de la familia de Marta para que se investigara este teléfono, aunque la Audiencia no permitió analizar los datos de los móviles de otras personas juzgadas y absueltas como el hermano de Carcaño, Francisco Javier Delgado, su novia María García Mendaro y el amigo del asesino Samuel Benítez.

Mientras tanto, Miguel Carcaño está cumpliendo su condena en la prisión de Herrera de la Mancha, en Ciudad Real, y sigue manteniendo la versión de que fue su hermano quien mató a Marta cuando la joven medió en una pelea entre ambos por los impagos de la hipoteca.