En los últimos años, la concienciación por el medio ambiente ha cobrado un protagonismo importante. El gran incremento de las emisiones CO2, sumado a las cada vez mayores olas de calor y frío, sugieren un cambio inmediato para poder revertir el cambio climático en nuestro planeta.

Gasargi es una empresa de servicios energéticos alavesa que aporta soluciones a empresas e instituciones que buscan reducir sus costes y conseguir la máxima eficiencia energética. Con propuestas comprometidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, es la única empresa del territorio histórico que es miembro de la Asociación de Empresas de Eficiencia Energética de España (A3E) y en participar en IFEMA de GENERA 2022, la feria de energía y medio ambiente más importante del país. Un privilegio del que muy pocas firmas pueden presumir. “Para nosotros es un orgullo”, afirma Jesús Muñoz, gerente de Gasargi.

Una exposición en la que participaron por primera vez este pasado mes de junio y en la que instauraron la integración de las energías renovables en el sector terciario de la mano del colegio Carmelitas Sagrado Corazón en Vitoria-Gasteiz. Un proyecto en el que Gasargi realiza monitorización de consumos, auditoría energética, cálculo de la huella de carbono y el programa de reducción y compensación de la energía. Unas características que lleva a cabo este colegio debido a la particularidad de la construcción. “Es un edificio complicado porque son 4 o 5 bloques anexos”, comenta Muñoz refiriéndose a distintos espacios como la iglesia o el convento. Una tarea algo complicada a la hora de tener un registro y un control de todos los parámetros de energía y que, según Muñoz, “es complicado y lleva su tiempo”. Un modelo que también han explicado y presentado a los centros educativos de Corazonistas, Urkide y Marianistas de la capital alavesa, pero que no han profundizado en ello. “Lo ven con buenos ojos, pero no de manera instantánea”, señala Muñoz en este sentido.

Un caso único

Pero no solamente tienen este exitoso logro en su haber. Gasargi también ha sido la encargada de realizar y gestionar la primera boda en España con huella de carbono 0. Este acontecimiento surgió por parte de uno de los clientes, que quería realizar un regalo original a su mujer. De esta manera, y tras aprobarse esta idea, se calcularon todos los gastos, desde las emisiones CO2 de todos los vehículos de los invitados hasta el viaje de los novios. Una compensación que se realizó en la Reserva de la Biosfera del Urdaibai, con la plantación de determinadas plantas, arbustos y árboles. “Tiene que ser una zona para reforestar o una zona que se haya quemado”, precisa Muñoz. Una iniciativa que Muñoz cree que se va a seguir extendiendo a otros eventos, como festivales o congresos a corto plazo. “Esto tarde o temprano va a ser cada vez más popular”, apunta.

Nuevos retos

Además, Gasargi ya tiene otro plan de este estilo en marcha. Concretamente en la localidad alavesa de Aramaio, en la que es el propio Ayuntamiento el que distribuye la electricidad entre sus vecinos. “Hemos realizado una auditoría energética de todos los espacios para hacer un programa de reducción”, manifiesta Muñoz. Al margen de esto, el Consistorio ha desarrollado un plan de acción de energía y clima. “Lo que quieren es que toda la producción de energías venga con fuentes de origen renovable”, resalta Muñoz. Un proyecto innovador que para finales de este mismo año debería estar listo.