La lava sigue avanzando por las coladas creadas hasta el momento por el volcán, sin afectar a nuevas zonas, y la meteorología en la isla de La Palma es favorable de cara a alejar la nube de gases emitida, ha informado este sábado la portavoz del comité científico del Pevolca, Carmen López.

"Transcurren igual, rebosando en algunos puntos pero sin afectar a nuevas superficies", indicó en la rueda de prensa posterior a la reunión diaria del Pevolca.

El viento y los alisios están actuando de manera "favorable" sobre la nube, impulsándola hasta el suroeste, generando un "escenario favorable" también para la "operatividad aérea".

Además, ha disminuido la sismicidad, lo que el director del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, calificó de "relevante", aunque detalló que eso no quiere decir que el volcán esté cerca de su final.

La sismicidad se sigue produciendo en las mismas áreas y con las mismas profundidades, con una magnitud máxima de 4 puntos en la escala Richter, ayer a la 1.10 horas de la madrugada a 11 kilómetros de profundidad.

La emisión de dióxido de azufre llegó ayer a 26.000 toneladas diarias, mientras que la de dióxido de carbono es ascendente, hasta las 1.900 toneladas diarias el día 5 de noviembre.

La calidad de aire en la isla de La Palma es "buena o razonablemente buena" en el conjunto, salvo en Puntagorda y Los Llanos de Aridane, donde no se confina pero se recomienda el uso de mascarillas FFP2 así como gafas de protección.

SIN DATOS DE DERRUMBES DE TEJADOS POR LA LLUVIA Y LA CENIZA

Morcuende detalló que hasta el momento no tienen informaciones sobre derrumbes provocados por la lluvia en tejados con ceniza acumulada, aunque comentó que van a estar pendientes de ello.

Sobre la limpieza de cenizas, dijo que hay un "enorme montante de toneladas" de ella, pero que ayuntamientos y empresas están trabajando para limpiar, avanzando que "pronto" se incorporarán máquinas específicas para zonas urbanas que la recogerá "por aspiración".

Por otra parte, actualizó el número de albergados, que se sitúan en 465, una menos que ayer. De ellas 398 están en un hotel de Fuencaliente y 67 en otro en Los Llanos de Aridane. Un total de 43 están en centros sociosanitarios.

Las hectáreas afectadas ascienden a 983,44, con una anchura máxima de colada de 3.100 metros y un perímetro de 56,23 kilómetros. Los daños en infraestructuras ascienden a 1.446 edificaciones destruidas, 1.171 viviendas, 147 agrícolas, 33 en ocio y hostelería y 66 industriales.

La calidad del agua es buena y Morcuende ha aprovechado para volver a pedir precaución a los peatones que circulen por carreteras o zonas sensibles.