ASCÓ. El CSN asegura que el suceso "no ha tenido impacto en los trabajadores, el público, ni en el medio ambiente" y añade que se clasifica en el 0 dentro de la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos.

En esta escala, el 0 "no tiene significación para la seguridad", mientras que el 1 se considera una anomalía, el 2 un incidente, el 3 un incidente importante, el 4 un accidente con consecuencias de alcance local, el 5 un accidente con consecuencias de mayor alcance, el 6 un accidente importante y el 7 (y máximo) un accidente grave.

La parada de la turbina principal que ha provocado la detención del reactor ha tenido su origen, según el CSN, en la parada del alternador a raíz de una señal de "alta temperatura en una de sus fases".

Al detenerse el alternador, la turbina ha dejado de funcionar y esta, a su vez, ha provocado la parada del reactor.

Según las fuentes, la detención del reactor en estos casos se produce cuando la potencia se encuentra por encima del 35 % y, en el caso de hoy, la central estaba funcionando al total de su potencia.