DONOSTIA. Según esta fuente, durante el mismo período, en Nafarroa se ha producido la muerte de una persona, después de dos años en los que tampoco se habían registrado fallecimientos durante la Semana Santa.
Los dos accidentes mortales sucedidos en Euskadi tuvieron lugar el pasado sábado en Araba. El primero de ellos fue una salida de calzada ocurrida en Júndiz, en la que falleció una mujer de 41 años, mientras que el segundo, también de las mismas características, se cobró la vida de un hombre de 50 años en Zuia.
Se da la circunstancia de que una tercera persona, un hombre de 71 años, murió el pasado lunes mientras circulaba con su vehículo por Azkoitia, si bien en este caso el fallecimiento fue debido a causas naturales ya que todo parece apuntar a que "se habría sentido indispuesto antes de sufrir el accidente" lo que impide considerarlo una muerte por accidente de tráfico "en sentido estricto".
En total, en Euskadi se han registrado durante la pasada Semana Santa un total de 59 accidentes con 24 heridos, dos de ellos de gravedad, lo que supone una disminución del número de accidentes respecto al año pasado en el que se produjeron 60, mientras que la cifra de heridos es igual a la de 2018.
En cuanto a los desplazamientos, entre el 17 y el 22 de abril se registraron en las carreteras vascas 472.000, un 3 % más que en 2018.
En el caso de Nafarroa, el siniestro mortal sucedido en esta comunidad tuvo lugar el pasado domingo en Corella, donde murió un joven de 27 años en un accidente en el que resultaron heridas dos personas y en el que se vieron implicados dos vehículos.
