Bilbao - La Consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno vasco, Ana Oregi, reclamó ayer que acabe “el vodevil” alrededor de la central de Garoña y sea cerrada definitivamente porque “ya ha cumplido sus expectativas” y sería “un exceso” reabrirla. Oregi respondió de esta forma a las declaraciones realizadas el martes por la consejera del Consejo de Seguridad Nuclear, Cristina Narbona, sobre que podrían primar los intereses económicos de Nuclenor sobre los de seguridad a la hora de decidir la reapertura de la central nuclear.

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, la consejera consideró “preocupante que pueda producirse esa posibilidad. Nosotros hemos defendido desde el Gobierno vasco que Garoña es una central que ha cumplido ya sus expectativas y es una central de primera generación”, ilustró. A su juicio, alargar su vida supondría que podría llegar a alcanzar hasta sesenta años de actividad “y eso es un exceso”.

“Hemos pedido en todos los foros en los que hemos podido elevar la voz el cierre de la central de Garoña sin ningún tipo de condiciones y estamos asistiendo a una especie de vodevil. Un día es que se cierra, otro día se vuelven a reunir. Ya está bien, hay que hacer las cosas con otra seriedad y Garoña debe ser cerrada”, zanjó. - E. P.