Bilbao. El Gobierno español ha desandado todo el camino recorrido este año en la regularización del empleo doméstico y ha vuelto a dejar en manos de las trabajadoras de hogar la responsabilidad de darse de alta en la Seguridad Social y cotizar. La Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia ha criticado el decreto ley aprobado ayer por el Consejo de Ministros por considerar que mantendrá en la economía sumergida a buena parte de las 90.000 empleadas domésticas que trabajan en la CAV.

Ayer el Consejo de Ministros aprobó un decreto ley que simplifica el mecanismo de altas y bajas para los empleados del hogar, así como la comunicación con la Seguridad Social, con el objetivo de promover la afiliación de aquellos que trabajan menos horas mensuales o lo hacen de forma discontinua en varias casas. A partir de ahora, se permite que la responsabilidad del alta y otros trámites en la Seguridad Social pase del empleador al empleado, siempre que haya acuerdo entre ambos para hacerlo así y cuando el trabajador preste sus servicios por un tiempo inferior a 60 horas mensuales. También se reducen los tramos de cotización, elevando los más bajos por encima de los salarios.

Nada más conocerse los términos de las nueva regulación, la Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia denunció que el PP "ha acordado suprimir la obligación del empleador de dar de alta y cotizar en todos los casos", por lo que "se vuelve al sistema del pasado, liberando al empleador de dar de alta y cotizar a la Seguridad Social por las empleadas de hogar contratadas menos de 60 horas mensuales".

También criticó que "se reducen los tramos de cotización, elevando los más bajos, incluso por encima de los salarios percibidos". En ese sentido, la Asociación recordó que, "en el pasado, estas dos medidas, alta y cotización a cargo de la trabajadora y elevación de la base de cotización por encima del verdadero salario, han tenido como consecuencia una gran cantidad de economía sumergida en el empleo de hogar".

fuera del sistema "No tenemos duda de que la verdadera intención del Gobierno es mantener fuera del sistema de la Seguridad Social a un gran número de mujeres dedicadas al empleo de hogar, que de esa manera no podrán exigir en el futuro prestaciones como maternidad, baja de enfermedad, invalidez y jubilación", concluyó la ATH.

Esta asociación también criticó que el Gobierno español solo suba el salario mínimo un 0,6%, hasta 645,30 euros mensuales en catorce pagas, ya que, en opinión del colectivo, esta medida coloca el salario de las trabajadoras de hogar "bajo mínimos". La ATH recuerda que en la CAV hay unas 90.000 personas dedicadas al empleo de hogar, mientras que en el conjunto del Estado las personas empleadas en el hogar son 667.000, y casi el 90% de ellas son mujeres.

Por su parte, el sindicato CC.OO. tachó ayer de "absurda" la decisión del Gobierno de reformar del sistema especial de empleados del hogar ya que, en su opinión, el sistema ha tenido éxito y los cambios pueden suponer que los trabajadores tengan que asumir el ingreso de las cotizaciones sociales en su totalidad. Añadió que los cambios introducidos pretenden transferir a los empleados responsabilidades que no les corresponden, por lo que recomienda a los empleadores a que mantengan "en todos los casos" sus responsabilidades en previsión de situaciones de inseguridad jurídica.